En el marco del Día Mundial de la Obesidad que hoy se conmemora, la Dra. Maria Luisa de Mingo, jefa de servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario La Luz y la nutricionista Laura Sánchez del mismo centro, advierten sobre la concienciación de esta enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. La obesidad es una pandemia silenciosa que ha experimentado grandes avances en su tratamiento farmacológico, pero que también requiere de un enfoque integral para su manejo.
Recientemente, nuevos fármacos inyectables como Semaglutide y Tirzepatide han irrumpido en el mercado con un potente efecto inhibitorio del apetito, logrando pérdidas de peso comparables a las de la cirugía bariátrica. No obstante, la Dra. María Luisa de Mingo indica la importancia de utilizar estos tratamientos bajo prescripción médica y dentro de las indicaciones establecidas: pacientes con un Índice de Masa Corporal (IMC) ≥ 30 kg/m2 o con un IMC ≥ 27 kg/m2 en presencia de comorbilidades como diabetes, hipertensión o apnea del sueño. Además, recalca que no todas las personas responden de la misma manera a estos fármacos y que su efectividad debe evaluarse tras 12-16 semanas de tratamiento.
Desde el punto de vista nutricional, Laura Sánchez subraya que la obesidad es una condición multifactorial y que la clave está en adoptar hábitos de vida saludables más allá de la cultura de la dieta. "Estar delgado no es sinónimo de salud, ni estar obeso implica necesariamente enfermedad. Debemos enfocarnos en mantenernos activos, dormir bien y llevar una alimentación equilibrada sin caer en restricciones extremas ni demonizar ciertos alimentos", enfatiza.
El Hospital Universitario La Luz reafirma su compromiso con la educación y el acompañamiento de los pacientes con obesidad, promoviendo un abordaje médico, nutricional y psicológico para mejorar su calidad de vida.