El gigante aeronáutico Boeing ha experimentado un aumento significativo en sus pérdidas netas durante los primeros nueve meses de este año, alcanzando los 7.968 millones de dólares, lo que representa un incremento del 260% en comparación con el mismo período del año anterior, cuando las pérdidas se situaron en 2.212 millones de dólares. Este incremento se atribuye principalmente al impacto de la huelga de 33.000 trabajadores en Seattle, Estados Unidos.
La huelga de los trabajadores de Boeing en Seattle ha tenido consecuencias significativas en las finanzas de la compañía. Los empleados en huelga votarán en los próximos días si aceptan la propuesta de la empresa de aumentar los salarios en un 35%, después de casi seis semanas de protesta. Este preacuerdo, alcanzado recientemente, incluye un incremento salarial del 35% distribuido en cuatro años, una bonificación anual garantizada del 4% y una bonificación adicional de 7.000 dólares si es aceptado.
Ante esta situación, el consejero delegado de Boeing, Kelly Ortberg, ha reconocido que la compañía enfrenta un desafío importante para recuperar su posición en el mercado. Ortberg ha expresado que, con el enfoque y la cultura adecuados, Boeing puede volver a ser "una empresa emblemática y un líder aeroespacial". Asimismo, ha señalado que la empresa se enfocará en cambiar fundamentalmente su cultura, estabilizar el negocio y mejorar la ejecución de los programas para sentar las bases de su futuro.
Los ingresos de Boeing han descendido un 8% en los primeros nueve meses de 2023, situándose en 51.275 millones de dólares. Por otro lado, el flujo de caja operativo ha registrado un resultado negativo de 8.630 millones de dólares, reflejando el impacto de las menores entregas comerciales y el desfavorable calendario del capital circulante, incluyendo la huelga en Seattle.
Además, la deuda consolidada de la compañía ha disminuido a 57.700 millones de dólares en el tercer trimestre, en comparación con los 57.900 millones de dólares del trimestre anterior. En octubre, Boeing ha suscrito una nueva línea de crédito a corto plazo de 10.000 millones de dólares, lo que eleva su acceso total a líneas de crédito a 20.000 millones de dólares, que aún no han sido utilizados.
