En el marco de su compromiso con la sostenibilidad y con el objetivo de ayudar a sus clientes en la transición hacia una movilidad ‘verde’, Unicaja ofrece financiación específica a empresas y autónomos para la adquisición de vehículos sostenibles. Esta prestación se suma a la oferta de la que ya se benefician los clientes particulares.
Unicaja ha adaptado al tejido empresarial su Préstamo personal para inversiones, teniendo en cuenta la necesidad, cada vez mayor, de autónomos y empresas de disponer de vehículos eficientes para el desarrollo de su actividad.
Esta financiación, en condiciones ventajosas, está pensada tanto para vehículos nuevos como de segunda mano (eléctricos, híbridos enchufables y parte de los híbridos convencionales). También se incluye la instalación del punto de recarga eléctrica si se adquiere simultáneamente.
En concreto, la finalidad de este préstamo es la adquisición de vehículos a motor de bajas emisiones de CO2 (menos de 50 g/km) o de menos de cuatro ruedas con cero emisiones directas de dióxido de carbono, según establece la taxonomía ambiental europea.
En el caso de los clientes particulares, la entidad ofrece el Préstamo Ecomovilidad, con el que financiar coches sostenibles, tanto nuevos como seminuevos o de segunda mano, así como los puntos de recarga eléctrica. Además, contempla otros vehículos de menos de cuatro ruedas con emisiones cero e, incluso, embarcaciones de recreo con el mismo distintivo ambiental.
Con esta nueva financiación, Unicaja amplía su catálogo de productos y servicios sostenibles, dotándolos de precios más reducidos y cumpliendo criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés).
Promoviendo que la movilidad de sus clientes sea más sostenible, Unicaja favorece la transición hacia un estilo de vida más 'verde', contribuyendo a combatir el cambio climático, en tanto que la reducción en la emisión de gases contaminantes producirá un menor impacto medioambiental.
Descarbonización
Descarbonizar el sector del transporte es fundamental para alcanzar los objetivos climáticos de la Unión Europea, promoviendo que la movilidad sea más sostenible y al mismo tiempo se garantice la conectividad.
Precisamente, Unicaja, además de certificar su propia huella corporativa de carbono y contribuir a su reducción periódica, cuenta con objetivos para la descarbonización de su cartera crediticia.
En general, el desarrollo y el impulso de fuentes de energía renovables, así como la potenciación de medidas que mejoren la eficiencia energética son objetivos prioritarios para Unicaja, no solo por contribuir a reducir las emisiones de dióxido de carbono o el impacto medioambiental, sino también por conllevar un ahorro económico para las familias.
Unicaja se adhirió en 2013 al Pacto Mundial de las Naciones Unidas y en 2019 al Compromiso Colectivo para la Acción Climática. Además, es una de las entidades firmantes de los Principios de Banca Responsable y se comprometió a alinear su negocio con la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el Acuerdo de París sobre el cambio climático.
Esta política sitúa a Unicaja como un banco responsable, que contribuye a la sostenibilidad y a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.