Semana y media le queda a Telefonica para el momento de la verdad. Hablamos de la presentación de sus resultados del viernes 4 de noviembre, que parece ser el día de las tecnológicas, porque también publicarán los suyos Cellnex y Amadeus, entre otros.
Y quizá tengamos alguna novedad sobre esas informaciones que indican que está revisando su Plan Estratégico para acompasarlo con el deterioro de las estimaciones macroeconómicas y ponerlo al día. Incluso con la mirada puesta en la salida a bolsa de su filial Tech. Pero no solo eso, tampoco las noticias que llegan de Bruselas ayudan mucho a la operadora presidida por José María Álvarez Pallete.
Y es que, la pasada semana el cerrojazo comunitario a las nuevas fusiones en el sector no ayuda ante el nuevo examen de la fusión entre O2, su filial británica y Hutchinson, una vez que la abogada general, cuyas conclusiones suelen coincidir con las decisiones del Tribunal de Justicia de la Unión, haya decidido anular la sentencia de 2020 y devolver el caso al Tribunal General con una sentencia que podría publicarse cuando comience el próximo ejercicio.
En su gráfico de cotización vemos que todo pasa factura a una Telefónica, que avanzaba ayer por debajo del ritmo que imprimía el Ibex, pero que le sirve para retomar algo de aliento tras las caídas mensuales que alcanzan el 8%. La noticia de la adquisición junto con el fondo KKR de la red de fibra de Entel en chile por 365 millones de euros, se leían bien en el mercado. En lo que va de año, sin embargo, mantiene las pérdidas a doble dígito que ya superan el 11,7%.
En cuanto a recomendaciones, vemos que el pasado día 21 Barclays volvía a recortar hasta los 3,9 euros por acción el precio objetivo de sus acciones, desde los 4,10 euros anteriores. Recortes que antes habían implementado en su PO dos firmas más. Por un lado, Mirabaud, con un generoso precio objetivo de 5,04 euros anteriores y que ahora pone el día con una reducción hasta los 4,44 euros por título, a pesar de que repite su consejo de compra.
Por el otro, Goldman Sachs dejan el rating del valor en neutral, como indica su analista Yemi Falana, que también revisa a la baja su PO hasta los 4,40 euros desde los 4,50 anteriores por la previsión de menores ganancias debido a dos factores: el aumento de costes y el de los tipos de interés. A pesar de ello si potencial alcista alcanza el 34%.
Para José Antonio González, analista de mercados de Estrategias de Inversión, Telefónica “sigue cediendo soportes pese a la acumulación de lecturas de sobreventa acumulada en el oscilador MACD en escala temporal diaria y semanal. La situación técnica se encuentra fuertemente deteriorada, con el reciente corte bajista por parte de sus medias móviles de medio y largo plazo, y con la media de 30 semanas mostrando síntomas de giro bajista. El cambio de tendencia es claro a medio plazo, por lo que los rebotes al alza que pudieran desarrollarse para purgar excesos bajistas en MACD, se presentan como oportunidad de venta a precios más competitivos”.
Telefónica en gráfico semanal (Izq.) y diario (Dcha.) con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Apenas un punto de los 10 posibles para el valor es lo que arrojan los indicadores técnicos que elabora Estrategias de Inversión, con el volumen de negocio a largo plazo creciente como único que se mueve en positivo en el caso de Telefónica.
En el otro lado nos encontramos con una tendencia que, a medio y largo plazo, es bajista, con momento total, tanto lento como rápido que es negativo, el volumen de negocio a medio plazo que es decreciente y la volatilidad o rango de amplitud que, en ambas vertientes, a medio y largo plazo, es creciente para los títulos de Telefónica.