El cierre de esas dos operaciones a comienzos de junio se ha reflejado en un beneficio neto de 8.629 millones de euros en el primer semestre del año. Se trata igualmente de una cifra sin precedentes, la más alta de la historia de Telefónica.
La finalización de estas transacciones también ha propiciado una histórica reducción de la deuda financiera neta de la operadora de telecomunicaciones. Acaba junio en los 26.200 millones de euros, un 29,5% por debajo de la de junio de 2020. En los últimos cinco años, la deuda de la compañía ha sido rebajada a la mitad, desde los más de 52.000 millones de euros registrados a junio de 2016.
Al mismo tiempo, las plusvalías procedentes de las operaciones han reforzado el balance del grupo, que cuenta ahora con una estructura de capital más eficiente que incrementa la calidad del valor de la compañía, con un aumento del patrimonio neto superior a los 10.000 millones de euros. Telefónica cuenta además con una sólida posición de liquidez, que aumenta hasta los 26.924 millones de euros.
“Estos resultados demuestran que Telefónica está en la senda correcta, ejecutando su plan estratégico como acelerador crítico en el proceso de transformación de la compañía. Telefónica consolida su liderazgo como una compañía que aprovecha todas las oportunidades que ofrece la revolución digital, como una compañía responsable, sostenible y apostando siempre por la excelencia operativa”, asegura el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.
En el primer semestre, los ingresos han alcanzado los 20.305 millones de euros, un 6,5% menos con respecto a la cifra reportada en junio de 2020. En el segundo trimestre, los ingresos del grupo se han situado en los 9.964 millones de euros, un 3,6% menos que en el mismo periodo de 2020.
El flujo de caja libre generado hasta junio ha aumentado un 30,9%, hasta los 1.613 millones de euros. Destaca igualmente en el segundo trimestre la reducción del impacto negativo de los tipos de cambio en las cuentas, principalmente de las monedas latinoamericanas. La apreciación del real brasileño desde abril ha limitado el efecto de las divisas en el OIBDA a 78 millones de euros en el segundo trimestre, muy por debajo de los 288 millones de los tres primeros meses de 2021.
Eleva sus previsiones y mantiene el dividendo
La favorable evolución del negocio en el primer semestre y las positivas perspectivas para la segunda mitad del año en los mercados principales de Telefónica llevan a la compañía a elevar sus objetivos financieros para 2021. Si la anterior referencia contemplaba una estabilización de los ingresos y del resultado operativo antes de amortizaciones (OIBDA), ahora considera que se moverán entre la estabilización y un ligero crecimiento. Además, mantiene la vuelta a un nivel normalizado de inversión (CapEx) sobre ventas de hasta el 15%.
Telefónica confirma su remuneración al accionista en 2021 con un dividendo de 0,30 euros que será abonado en dos tramos, 0,15 euros en diciembre de este año y otros 0,15 euros en junio de 2022, mediante la fórmula de dividendo flexible voluntario (‘scrip dividend’). Como novedad, la compañía anuncia que propondrá a los accionistas la amortización del 0,7% del capital que tenía en autocartera con fecha de 30 de junio de 2021.