Sacyr ha presentado poco antes de cerrar el mercado, su cuenta de resultados correspondiente al ejercicio 2018, unas cifras que dejan ganancias y Ebitda en positivo, gracias a la estrategia emprendida por Sacyr en 2015, que pone el foco en la rentabilidad, en la disciplina financiera y en la expansión internacional y diversificación de las áreas de negocio.
En concreto, Sacyr alcanzó un beneficio neto el año pasado de 150,39 millones de euros, lo que supone un 15,1% más que en 2017.
La facturación de Sacyr se situó en 3.795,71 millones de euros, un 22,7% más que durante 2017. El 60% de estos ingresos se obtuvieron en los mercados internacionales.
Sacyr alcanzó un Ebitda de 543,28 millones de euros en 2018, un 28,6% más que en el ejercicio anterior.
Las cuatro divisiones de Sacyr incrementaron su Ebitda durante 2018: Ingeniería e Infraestructuras (+82%), Concesiones (+17%), Servicios (+14%) e Industrial (+5%). La rentabilidad de los negocios, medida por el margen de Ebitda, pasó del 13,7% de 2017 al 14,3%.
La deuda neta proforma del grupo se sitúa en 4.046 millones de euros. Más del 70% del endeudamiento está vinculado a proyectos concesionales.
Política de dividendos
La solidez de los resultados y la buena evolución de los negocios de la compañía marcan el reinicio de una política regular de dividendos. En 2018, la compañía entregó dos scrip dividend, que sumaron una remuneración de 0,103 euros por acción.
Cartera de ingresos
La cartera de ingresos futuros cerró el año en 41.674 millones de euros (+2%). La cartera refleja la fuerte internacionalización de la compañía: el 71% está situada ya fuera de España. Por áreas geográficas: América supone el 38% de la cartera, Europa el 59% y un 3% está ubicado en otros continentes. Y por actividades, en Infraestructuras los contratos internacionales representan el 88% del total; en Concesiones, el 82%; en Servicios, el 29%; y en Industrial, el 11%.
Durante 2018, la compañía ganó proyectos relevantes en todas sus divisiones. Entre ellos, destacan la remodelación del ferrocarril central de Uruguay, la construcción del Metro de Fortaleza (Brasil) y los cuatro primeros contratos de la filial constructora en EEUU por un total de 318 millones de euros. La entrada en el país norteamericano era uno de los hitos más relevantes del Plan Estratégico.
Objetivos
Sacyr cierra 2018, el cuarto año del Plan Estratégico 2015-2020, con los objetivos marcados cumplidos y con nuevas metas para 2020.
Desde que se lanzara el Plan Estratégico, el EBITDA de la multinacional ha disfrutado de un crecimiento anual acumulado del 23%, mientras que el resultado neto y el flujo de caja operativo han crecido, respectivamente, el 46% y el 76% anual.
La compañía ha avanzado en este periodo en su foco en el negocio concesional y el 75% del EBITDA ya procede de activos concesionales. Para el bienio 2019-2020, la compañía renueva sus objetivos:
• Crecimiento continuo y sostenible en el negocio concesional para alcanzar la meta de que más del 85% de los flujos de caja sean recurrentes y estables.
• Afianzamiento en los mercados domésticos y crecimiento selectivo en el mercado anglosajón (EEUU, Canadá, Australia y Reino Unido).
• Selección de proyectos con criterio de generación de caja y rentabilidad.
• Estricta disciplina financiera y reducción de la deuda con recurso.
• Innovación y tecnología para alcanzar la excelencia técnica.
• Sostenibilidad y liderazgo tecnológico en economía circular.
• Maximización del valor para el accionista.