Oryzon Genomics es una de esas empresas biofarmacéuticas, que más allá del mercado, despuntan como compañía de presente, pero sobre todo de futuro. Las terapias sanitarias de última generación además se han impuesto con verdadera fuerza, en especial a raíz de la pandemia.
Y Oryzon se encuentra a la vanguardia de lo que se conoce como los medicamentos epigénicos. Se trata de fármacos que fortalecen cambios en el ADN pero que no implican alteraciones de la secuencia subyacente. Y ahí trabaja esta compañía cotizada, en especial, en la investigación en terapias para combatir enfermedades con una fuerte necesidad médica no cubierta.
En el ámbito meramente bursátil la compañía refleja sus avances o retrocesos en este tipo de fármacos, que van dirigidos a combatir el cáncer ya problemas sobre el sistema nervioso central de nuestro organismo. Por ejemplo, entre lo último destacan sus datos finales sobre uno de sus ensayos ALICE, en fase iia, técnicamente hablando. Y han sido tan francamente buenos que han supuesto, en la consecución de cuatro sesiones en este mes, un avance conjunto del 22,3% nada menos, lo que le coloca como uno de los mejores en el último mes.
Así en su gráfica de cotización vemos fuertes caídas en la última sesión, lo que supone el cierre de la corrección tras las fortísimas subidas del 22% registradas ante las buenas noticias. En el último mes, las ganancias son a doble dígito, superan el 12%, mientras que, en lo que va de año, el saldo negativo es del 17,4%.
De hecho, ALICE investiga que investiga iadademstat en combinación con azacitidina en pacientes con leucemia mieloide aguda (LMA) ancianos o no elegibles para quimioterapia intensiva. Las señales de eficacia clínica fueron robustas, con una tasa de respuesta objetiva (ORR) del 81% ( 22 de 27 pacientes evaluables); de estos, el 64% fueron remisiones completas (14 CR/CRi) y el 36% remisiones parciales (8 PR).
De hecho, su consejero delegado y Fundador, Carlos Buesa reconoció en Estrategias de Inversión a este respecto que “ALICE es un ensayo clínico en leucemia, mieloide aguda, que hemos estado desarrollando. En los últimos cuatro años, la compañía ha estado en estos años dando avances parciales. Los datos cualitativos, lo que nos están diciendo es que un subconjunto de pacientes que a día de hoy responde mal a las terapias que están disponibles para estos pacientes que responden bastante bien a nuestro fármaco. Y esto ha levantado muchísimo interés.
Respecto al negocio destaca que “esto es un aldabonazo importante. Me gustaría recordar que hace unos días nuestro principal competidor en Estados Unidos ha sido adquirido por una multinacional por un valor de 1.400 millones de dólares, lo que deja a Oryzon en estos momentos como el único jugador independiente con un pipeline avanzado en estas moléculas inhibidoras de LSD1”.
Y las firmas más especializadas que siguen al valor lo corroboran, con posibles infartos para el valor. Es el caso de Edison Group, la más optimista, que coloca su precio objetivo en los 15,50 euros por acción la valoración de sus títulos, lo que supone de factor un recorrido espectacular del 600% sobre el precio de cierre de las acciones, de forma potencial a 12 meses vista.
También más que favorable se muestra Roth Capital que pone su PO en 15 euros por acción con una clara recomendación de compra sobre las acciones de Oryzon Genomics.
Lo último para la compañía es la subvención que acaba de recibir de la Unión Europea para seguir explorando el papel de iadademstat, sobre el que hemos hablado, para invertir en los enfoques de inmunoterapia oncológica. El proyecto comenzará el 1 de mayo de 2023 y tendrá una duración de dos años. El proyecto tiene un presupuesto global de 1,4 millones de euros, aportando Oryzon aproximadamente un 50%.
