Minoritarios de Duro Felguera unen fuerzas para tener mayor representatividad

El Sindicato de Accionistas Minoritarios (SAM) de Duro Felguera ha tomado medidas para fortalecer la posición de los pequeños accionistas ante la difícil situación que atraviesa la compañía asturiana. Ante la prórroga de tres meses del preconcurso de acreedores en el que se encuentra inmersa la empresa desde finales de 2021, el SAM ha decidido modificar el convenio de sindicación para permitir que todos los accionistas minoritarios puedan unir sus votos y tener así una mayor influencia.

El presidente del SAM, Eduardo Breña, explicó que esta modificación tiene como objetivo que todos los accionistas minoritarios puedan sindicar su voto, votando en la misma dirección en las juntas y, en caso necesario, emprender acciones legales de manera conjunta. Esta medida busca eliminar restricciones en la transmisión de acciones y brindar más libertad a los accionistas en defensa de sus intereses y del interés social de la compañía.

Los accionistas minoritarios creen firmemente que la unión del accionariado será crucial para encontrar una solución definitiva que permita la recuperación de Duro Felguera. Consideran que es fundamental aglutinar a todos los accionistas dispuestos a actuar en pro de la empresa y estar preparados para defender sus derechos. Hasta el momento, ni la SEPI ni los socios de control se han reunido con los accionistas minoritarios para respaldar las mejores medidas y encontrar una solución definitiva.

Los accionistas minoritarios han expresado su preocupación por la posible desaparición de Duro Felguera, calificándola como una "tremenda vergüenza nacional" y un símbolo del declive industrial en Asturias. Destacan la importancia de proteger la industria y las empresas estratégicas para evitar consecuencias graves.

Ante la inacción de otros colectivos, el SAM confía en la ley y el Estado de Derecho como último recurso para proteger los intereses de los accionistas minoritarios. Consideran que es fundamental contar con el apoyo necesario para evitar la desaparición de la empresa y confían en poder reflotar Duro Felguera con esfuerzo y determinación.

El SAM se muestra dispuesto a jugar un papel activo en el futuro de la compañía y a seguir defendiendo los intereses de los accionistas y trabajadores. Mantienen la mano tendida al diálogo con el consejo de administración de Duro Felguera y han iniciado una hoja de ruta para abordar los desafíos que se presentan.

Por otro lado, el SAM ha exigido transparencia en torno a la potencial venta de 'El Tallerón', la factoría de calderería pesada de Duro Felguera en Gijón, a Indra. La adquisición de esta factoría por parte de Indra para la fabricación de vehículos militares ha generado interés, aunque aún no se han especificado detalles sobre la operación.

La prórroga por tres meses del preconcurso de acreedores de Duro Felguera se enmarca en las negociaciones que la empresa debe llevar a cabo con entidades financieras y la SEPI para garantizar su viabilidad futura y la conservación de empleos. Además, el litigio en Argelia por el proyecto de Djelfa ha sido un factor determinante en la situación actual de la compañía.

La solicitud de arbitraje presentada por Sonelgaz Production d'Electricité (SPE) contra Duro Felguera por la suspensión del contrato de Djelfa ha tenido repercusiones significativas en la empresa. Este conflicto ha llevado a la reexpresión de los resultados financieros de Duro Felguera y ha generado la necesidad de buscar soluciones para garantizar su viabilidad a largo plazo.