La crisis económica provocada por la expansión del Covid-19 ha provocado que la mayoría de valores del Ibex 35 vean resentida su cotización en bolsa. Sólo dos valores se salvan: Cellnex y Grifols, que han cambiado su tendencia de consolidación por una alcista, y obtienen una nota de 9 sobre 10 gracias a sus indicadores técnicos.
Grifols, especializada en el sector farmacéutico y hospitalario, es una de las compañías españolas que más suena en las últimas semanas debido a que está desarrollando métodos para combatir el Covid-19 gracias al plasma de los pacientes ya curados, además de test de diagnóstico con mayor eficacia. Además, destaca que estas investigaciones se están llevando a cabo no sólo en España, sino también en Estados Unidos, en estrecha colaboración con sus organismos públicos de salud. Gracias a ello, la compañía se ha convertido en una de las favoritas dentro del sector en España a la hora de invertir.
Grifols ha modificado su tendencia de consolidación por una alcista, tanto en el medio como en el largo plazo. Por ello, obtiene una nota de 9 sobre 10 segúnnuestros indicadores técnicos. La compañía muestra un momento total positivo, así como un volumen creciente tanto en el medio como en el largo plazo. Sin embargo, su rango de amplitud, que marca la volatilidad, se mantiene creciente a medio y largo plazo.
La cotización de Grifols se ha mantenido estable en lo que va de año. Tras comenzar 2020 a un precio de 31,71 euros por acción, hoy anota subidas de en torno al 1% para situarse en los 30 euros por título.
La mayoría de brokers consultados por Reuters recomienda adquirir acciones de Grifols. Además, fijan su precio objetivo en 31,17 euros, con lo que le otorgan un potencial del 2,57%.
Cellnex también pasa de consolidación a alcista
Por su parte, Cellnex, especializada en infraestructuras de telecomunicaciones, ha conseguido mantener una buena tendencia gracias a que opera no sólo en España sino también fuera de sus fronteras, en mercados como Italia, Países Bajos, Francia o recientemente Portugal. Además, sus buenos resultados correspondientes al ejercicio 2019 le permiten tener buenos niveles de liquidez para este año. Hace unos días, la compañía reiteró que sus previsiones para 2020 se mantienen por el momento.
En el transcurso del año, se trata de una de las pocas firmas que ha conseguido aumentar de valor en el Ibex 35. Tras comenzar el año a un precio de 39,4 euros por acción, hoy supera los 47 euros, lo que le acerca cada vez más a sus niveles de resistencia, situados en 49,18 euros tanto a medio como a largo plazo.
En cuanto a sus indicadores técnicos, la tendencia de Cellnex ha pasado de consolidación a alcista, tanto en el medio como en el largo plazo, por lo que obtiene una puntuación de 9 sobre 10. Su momento total lento es positivo, así como su volumen a medio y largo plazo. No obstante, el rango de amplitud se sitúa creciente tanto a largo como a medio plazo.
Ayer, Kepler Capital Markets revisó al alza el precio objetivo de la compañía de telecomunicaciones, situándolo en 55 euros por acción, desde los 53 euros anteriores, lo que supone un potencial para la compañía de en torno al 20%.
Además, el consenso de brokers revisado por Reuters recomienda comprar los títulos de Cellnex, aunque sitúan su precio objetivo en 46,03 euros, lo que supone un potencial negativo del 2,91%.