Iberdrola sigue muy afectada por las medidas del gobierno para recortar los denominados beneficios caídos o windfall profits de las nucleares y las hidráulicas que, redondeando, supondrán unos 1000 millones de euros menos de los que reciben las eléctricas para rebajar, esos sí, a medio plazo entre un 4 y un 5% la factura de la luz.
Algo a lo que, desde la Junta de Accionistas de la compañía ya le ha contestado la compañía. Su presidente, Ignacio Sánchez Galán afirma que es la Hacienda Pública, la que de verdad se va a beneficiar de los altos precios de la electricidad en el mercado mayorista que, como saben, han alcanzado máximos en la última semana de hasta 90 euros el MW hora. También ha cargado contra la administración, al indicar también los beneficios que supone la venta de derechos de CO2 que este año podrían alcanzar los 2.500 millones de euros.
Mientras, el gobierno rebajará esa cuestionada fiscalidad: de forma temporal, el Consejo de ministros de mañana jueves, convocado de forma extraordinaria, aprobará una rebaja del IVA para la factura de la luz del 21 al 10% para que ya se note en lo que pagaremos en los próximos meses.
Pero el mayor daño inmediato llega de Deutsche Bank: ha reducido su recomendación sobre la eléctrica, desde comprar hasta mantener y rebaja además su precio objetivo desde los 12 euros a los 11,40 por acción.
Para que nos hagamos una idea, la segunda compañía en capitalización del mercado español tras Inditex, con un valor de 69.380 millones de euros, es uno de los escasos valores, hasta 6, que se mueven en negativo en lo que va de año en el selectivo español.
En concreto Iberdrola es el cuarto que más cede en este año, con recortes del 6,32% para el valor desde que comenzara el ejercicio. Con pérdidas acumuladas en el último mes completo del 5,26% y a un 8% tan solo de los peores niveles del ejercicio.
Sin embargo, lo cierto es que el comportamiento bursátil, Holaluz gana por goleada en lo que llevamos de año a Iberdrola. En un 81% nada menos: entre las pérdidas de la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán y los avances superiores al 75% anuales de Holaluz, que apenas capitaliza 290 millones de euros en el BME Growth.
Y con máximos históricos el pasado dos de junio, en los 14,50 euros por acción, de los que apenas le separa menos de un 3%. En su gráfica de cotización vemos como el valor avanza un 5,22% en las últimas 20 sesiones y también se muestra ligeramente en positivo en lo que llevamos de este mes de junio con avances del 4,5%.
Iberdrola “cede posiciones con contundencia al más estricto corto plazo, comenzando a desarrollar una estructura de máximos y mínimos decrecientes que pone en jaque el soporte intermedio proyectado a partir de los 10,575 euros por acción y, cuya perforación, abre un escenario de continuidad bajista rumbo a los 10,06 / 9,91 euros por acción.
Iberdrola en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Los indicadores premium de Ei consideran que Iberdrola alcanza una mejora de un punto, con lo que alcanza una puntuación total de 6,5 puntos de los 10 posibles. Con tenencia alcista a largo plazo, momento total positivo, lento y rápido volumen a medio plazo creciente para el valor y volatilidad, también a medio plazo decreciente. En el lado negativo nos encontramos con la tendencia a medio plazo que es bajista, el volumen de negocio a largo plazo, decreciente y la creciente volatilidad que muestra el valor a largo plazo.
Y a todo esto sumar el plano judicial por el caso Villarejo: la fiscalía anticorrupción ha pedido imputar al presidente de Iberdrola por los espionajes de Villarejo, tal y como le ha comunicado en un escrito al juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón.
En el caso de Holaluz, el analista independiente Antonio Espín señala que “el valor tiene una zona de soporte en 13.15-13,20 aproximadamente, pero para entrar hay que hacerlo en una zona de 13.75-13,80 euros por acción y poner un stop en 13 euros. El valor está alcista, está interesante y está entrando dinero. Y la figura que ha hecho estos meses tiene connotaciones alcistas“.
Holaluz es una compañía, que según comentaba a EI una de sus cofundadoras, Carlota Pi, presenta un crecimiento equivalente de más del 40% interanual en los últimos cinco ejercicios. Está en el mercado desde 2019 y ya, no solo comercializa energía 100% verde, sino que, además, se están integrando verticalmente a través de generación distribuida, que se realiza, in situ, en los sitios donde se consume esa electricidad.
Por ejemplo, en lo que ellos llaman la revolución de los tejados: compran electricidad a lo que llaman prosumidores, familias a las que han ayudado a convertir sus tejados en energía 100% verde, porque a ciertas horas producen y a otras, consumen.
Se trata además de una compañía con elevada satisfacción por parte del cliente, algo que no es habitual en las compañías reguladas, como sus grandes competidoras y 4 de cada 10 nuevos clientes, provienen de la recomendación de alguno ya existente. Su idea es alcanzar 1 millón de clientes en 2023.