En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Iberdrola ha informado de que obtuvo un beneficio neto récord de 3.014,1 millones de euros en 2018, con un incremento del 7,5% con respecto al ejercicio anterior, pese a haber contabilizado en 2017 diferentes impactos extraordinarios positivos derivados de la fusión de Siemens-Gamesa, la reforma fiscal en EE.UU. y otros efectos no recurrentes.
En la presentación de sus cuentas, Iberdrola ha destacado que la mejora del beneficio neto se traduce en una propuesta de incremento del dividendo, que deberá aprobar la Junta General de Accionistas, de 7,7% hasta 0,351 euros por acción.
El EBITDA consolidado aumentó un 27,7%, hasta los 9.348,9 millones de euros, apoyado en un crecimiento en todos los negocios, y mostrando una aceleración progresiva desde junio. La consolidación de Neoenergia aporta 570 millones, mientras que el tipo de cambio resta 252 millones.
Desde un punto de vista operativo, Iberdrola ha destacado las mejoras tarifarias en Brasil, el aumento de la producción eólica terrestre (tanto por la mayor capacidad operativa como por mayor factor de carga) e hidroeléctrica, la normalización de condiciones del negocio liberalizado en Reino Unido y la mayor capacidad puesta en marcha en México.
Por el lado negativo, la compañía ha señalado el impacto de las tormentas en Estados Unidos.
El gasto operativo neto de Iberdrola descendió un 0,4% frente a 2017, apoyado en el tipo de cambio, las provisiones para planes de eficiencia contabilizadas en 2017 y la aplicación de la IFRS 15, que compensa la consolidación de Neo. La eficiencia operativa ha continuado su tendencia positiva en este último trimestre y mejora 11,5%, en comparación con la de final de año 2017. Así, el ratio Gasto Operativo Neto sobre Margen Bruto se sitúa en el 26,9%, frente al 31,2% del año pasado.
La deuda financiera neta ajustada de Iberdrola se sitúa en 34.149 millones de euros, principalmente como consecuencia del fuerte proceso inversor que se encuentra desarrollando el grupo.
Los fondos generados en operaciones del año 2018 ascienden a 7.328,4 millones de euros, un aumento del 13,1% respecto al mismo periodo del año anterior.
Por último, las inversiones netas del período ascienden a 5.320,4 millones. El 78% de las mismas se concentraron en el negocio de redes y renovables.
Iberdrola también ha informado de que como parte del plan de rotación de activos contemplado en las Perspectivas Estratégicas hasta 2022, el 16 de octubre, la compañía, a través de su filial ScottishPower, acordó la venta de sus activos de generación tradicional en Reino Unido a la compañía Drax Smart Generation, filial del grupo Drax, por 702 millones de libras (778 millones de euros), operación que se hizo efectiva el pasado 31 de diciembre.
Por otro lado, el pasado 18 de octubre se acordó la venta de su participación del 90% de la planta termosolar en Puertollano (50 MW) a la compañía Ence por un importe de 181,1 millones. Adicionalmente, se ha acordado el pago de un precio contingente (earn-out) de hasta 6,3 millones.
Con estas transacciones, el importe total de desinversiones alcanzado por Iberdrola en 2018 está cercano a los 1.200 millones de euros.
Según los indicadores técnicos de Estrategias de inversión, Iberdrola cotiza en fase alcista con una puntuación de 7,5 sobre 10. La tendencia es alcista tanto a medio como a largo plazo, con un momento positivo.
Plan de recompra de acciones
La eléctrica ha anunciado un programa de recompra de acciones propias que afectará a un máximo de 135.029.610 acciones representativas del 2,07% de su capital social y con un importe de 1.147,75 millones de euros. Según informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el programa de recompra comenzará este miércoles 20 de febrero, y permanecerá vigente hasta el 14 de junio de este año.
Las acciones se comprarán a precio de mercado y no comprará acciones a un precio superior al más elevado de los siguientes: el precio de la última operación independiente; o la oferta independiente más alta de ese momento en los centros de negociación donde se efectúe la compra. En lo que se refiere al volumen, Iberdrola no comprará en cualquier día de negociación más del 25 % del volumen diario medio de las acciones en el centro de negociación donde se efectúe la compra.
Iberdrola se reserva el derecho a finalizar el programa de recompra si, con anterioridad al 14 de junio, hubiera adquirido el número máximo de acciones autorizado por el consejo de administración, si se hubiera alcanzado el importe monetario máximo del programa de recompra "o si concurriese alguna otra circunstancia que así lo aconsejara", apunta la compañía.
Una recompra de acciones como la anunciada por Iberdrola reduce el número de acciones en circulación y esto hará aumentar el valor de las acciones en beneficio de los accionistas. La eléctrica lanza el mensaje de que la mejor estrategia ahora mismo es apostar por sí misma.