Iberdrola ha anunciado un beneficio neto de 1.257 millones de euros durante el primer trimestre, lo que supone un 30% más que en el mismo periodo de 2019. Los motivos de estos buenos resultados han sido el aumento de las amortizaciones y los impuestos, así como la venta de su participación en Siemens Gamesa, que ha supuesto plusvalías por valor de 485 millones de euros.
Si estas operaciones no se incluyeran, el beneficio neto ajustado sería de 968 millones, un 5% más que el conseguido durante el mismo periodo del año pasado.
Los ingresos, por su parte, han disminuido hasta los 9.425 millones, lo que supone un 7% menos. El EBITDA asciende hasta los 2.751 millones de euros, un 5,8% superior al registrado en el primer trimestre de 2019. Por otro lado, el flujo de caja ha crecido un 3,7%, registrando una cifra que supera los 2.000 millones.
Las inversiones efectuadas por la compañía se han incrementado en un 24% hasta los 1.729 millones, lo que ha supuesto que la deuda neta haya aumentado un 1,2%, sobrepasando los 38.000 millones.
Por ramas de negocio, la de Liberalizados creció un 26,5% y Renovables mejoró un 6,1%, mientras que el área Regulado sufrió caídas del 4,7% debido a los ajustes en Estados Unidos y España.
Respecto a la situación actual, la compañía ha puesto en marcha diferentes acciones en todos sus mercados para mitigar el impacto de la actual crisis. En España, destaca la caída de la demanda eléctrica peninsular, así como de los precios del mercado mayorista, debido a la declaración del estado de alarma. Esto ha supuesto que el beneficio neto en el mercado español haya disminuido en un 7%.
Repartirá un dividendo complementario en agosto
En cuanto al dividendo, Iberdrola ha anunciado que repartirá un dividendo complementario de, como mínimo, 0,232 euros por acción, que se abonará el próximo 4 de agosto, con el objetivo de alcanzar una retribución total al inversor de 0,40 euros por acción. Esto supone casi un 14% más que el repartido en el año anterior, con el objetivo de alcanzar las cifras fijadas para 2022. Además, Iberdrola permitirá que sus accionistas decidan si quieren recibir esta retribución en efectivo o a través de nuevas acciones de la compañía.
Desde Renta 4 destacan que las cifras de Iberdrola se sitúan por encima de sus expectativas, sobre todo gracias a los buenos resultados cosechados en las áreas de Renovables y Generación y Clientes.
A pesar de valorar positivamente estos datos, los analistas no consideran que vayan a traducirse en subidas significativas en la cotización de la compañía. Desde Renta 4 reiteran sobreponderar y revisarán su precio objetivo.
Por el momento, la compañía acumula bajadas cercanas al 1% en el Ibex 35, hasta situarse cerca de los 9 euros por acción.