En su discurso en la Junta General Ordinaria de Accionistas, la última que celebra Bankia como entidad independiente, ha subrayado que se trata de “un proyecto que, más allá del tamaño, nos debe conducir a liderar el profundo proceso de transformación que va a tener nuestro sector”.
Goirigolzarri se ha mostrado confiado en recibir en breve las autorizaciones para la fusión, momento en el que comenzará la unión real de las dos entidades, que culminará con la integración tecnológica, que, en principio, está prevista para finales de este 2021.
Bankia y Caixabank prevén ejecutar este viernes, a cierre de mercado, la operación de fusión por absorción con el canje de las acciones, mientras que ya el lunes 29 empezarán a cotizar los nuevos títulos de Caixabank emitidos, según ha explica la entidad este martes.
“Nosotros afrontamos este nuevo proyecto desde un propósito muy claro de crear una entidad más fuerte con el objetivo de que pueda apoyar a las familias y a las empresas de este país”, ha afirmado el presidente de Bankia, quien se ha mostrado convencido de que “solo a través de esta nueva entidad tendremos la fortaleza necesaria para convertirnos en actores principales de la recuperación de este país”. según recoge el comunicado de la entidad.
Además, según Goirigolzarri, “sólo a través de una entidad con el tamaño necesario seremos capaces de invertir y desarrollar herramientas y productos que satisfagan las necesidades de nuestros clientes”, y “sólo a través de una entidad en crecimiento seremos capaces de dotar a nuestros equipos de oportunidades profesionales para poder desarrollarse en los próximos años”.
Rentabilidad sostenible y dividendo
También ha considerado que “sólo a través de la creación de esta nueva entidad, los accionistas podrán beneficiarse del valor que generan las sinergias que está previsto obtener de esta fusión”. “Esta es la mejor forma de poder retribuirles en base a una rentabilidad que será muy superior en el caso de la entidad combinada, que en el caso de la entidad en solitario”, ha añadido.
En este sentido, ha reiterado que “tras la fusión, la nueva CaixaBank será una entidad con una gran fortaleza financiera capaz de generar una rentabilidad sostenible. Y esta es la condición necesaria para poder maximizar los dividendos en efectivo, que es el objetivo de todos nosotros”.
Con respecto a la aplicación del resultado, Bankia, siguiendo las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE) de extremar la prudencia en el actual contexto económico, y cumpliendo los términos del proyecto de fusión, decidió aplicar el resultado del ejercicio a reservas voluntarias, suprimiéndose el pago de dividendo. Así, será el nuevo Consejo de Administración de CaixaBank el que proponga el reparto de dividendo, al que tendrán derecho todos los accionistas de Bankia a fecha del reparto, en las mismas condiciones que los accionistas de CaixaBank.
El presidente de la entidad ha destacado que, a cierre de la semana pasada, la revalorización del precio de la acción ha sido del 69% respecto a la cotización que teníamos el día previo al anuncio de la operación. Esto se traduce en un diferencial de más de 20 puntos porcentuales sobre el crecimiento que ha tenido el Eurostoxx Banks o de 48 puntos porcentuales sobre IBEX.
Un ejercicio 2020 de “gran complejidad”
Goirigolzarri ha realizado una valoración del año 2020, un ejercicio que ha recordado fue de “gran complejidad”, y ha presentado ante la Junta un balance del último Plan Estratégico de la entidad proyectado para el periodo 2018-2020.
El año pasado “nos enfrentamos a una crisis sanitaria que todavía nos sigue dejando una intensa huella, tanto en términos de pérdida de vidas humanas como en términos económicos y sociales”. “Es, sin duda, uno de los retos más importantes que, como sociedad, hemos tenido que afrontar en los últimos años”, ha destacado.
El presidente de Bankia ha defendido que, ante esta situación, la entidad tuvo una “reacción extraordinaria”, tanto en la gestión de la pandemia como en el diseño y puesta en marcha de medidas para paliar sus efectos en los clientes.
Bankia mantuvo abiertas la práctica totalidad de las oficinas durante los meses de confinamiento estricto, mantuvo un excelente funcionamiento de los canales digitales y extendió el teletrabajo. “Esto no hubiera sido posible sin el compromiso de los profesionales de Bankia, que han demostrado a lo largo del ejercicio una gran capacidad de adaptación al nuevo contexto derivado de la pandemia, una gran responsabilidad y una absoluta vocación de servicio al cliente”, ha asegurado Goirigolzarri.
Por otra parte, la entidad impulsó el diseño de soluciones y productos para apoyar a familias, autónomos y empresas afectadas por la paralización de la actividad. Así, ha afirmado el presidente de Bankia, “hemos concedido moratorias de hipotecas y de crédito al consumo para los hogares que han perdido buena parte de sus ingresos durante el año y hemos ayudado a financiar, junto al ICO, a miles de empresas y autónomos, facilitando nuevas líneas de financiación con el objetivo de seguir haciendo viables sus proyectos empresariales”.
Apoyo a familias y empresas
En este sentido, el consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha señalado que se han concedido 54.000 créditos a empresas con garantía ICO, con un saldo dispuesto de más de 8.200 millones de euros, y 113.000 moratorias de crédito a particulares por un importe de 5.625 millones.
“Hemos cerrado un ejercicio de enorme complejidad en el que, por una parte, la actividad económica ha sufrido un descenso sin precedentes y, por otra parte, los tipos de interés han continuado reduciéndose”, ha subrayado el consejero delegado de la entidad.
Además, ha puesto en valor que “desde el punto de vista de la actividad comercial hemos crecido más que nuestros competidores en los segmentos clave de nuestro negocio” y que “el balance se ha fortalecido con una reducción de los activos improductivos y un avance muy importante de la ratio de solvencia”.
Sevilla ha explicado que el resultado core, que refleja la parte más recurrente de la cuenta de resultados, aumentó un 3,8% en 2020, hasta los 1.336 millones de euros, y que el beneficio neto de Bankia alcanzó 230 millones, tras realizar unas provisiones extraordinarias de 505 millones “para mitigar los efectos futuros de la pandemia”. Este beneficio supone un descenso del 57,6% sobre el año anterior, debido al menor resultado generado por las operaciones financieras, así como por las provisiones de carácter extraordinario mencionadas.
Para el consejero delegado, “hemos cerrado el que posiblemente ha sido el ejercicio más complicado de nuestra historia y en el que desde Bankia hemos trabajado para apoyar al conjunto de la sociedad y, al mismo tiempo, gestionar el negocio y la cuenta de resultados de forma satisfactoria”.
Y es que, según el presidente de Bankia, la situación generada por el Covid-19 también ha modificado el entorno financiero, de manera que las entidades no han sido inmunes a la pandemia y a sus consecuencias.
Por un lado, los tipos interés persistirán en Europa por un largo periodo de tiempo –“el mercado está descontando que no tendremos tipos positivos en el área del euro hasta febrero del año 2025” –, y, por otro lado, se ha producido un gran avance en la digitalización de la sociedad y los clientes de la banca, ha indicado Goirigolzarri.
Ante estas circunstancias, era necesario anticiparse en el proceso de consolidación del sector financiero español y buscar un socio que asegurara tamaño crítico, robustez financiera y una rentabilidad sostenible, tres “puntos clave” que se cumplen con la fusión con CaixaBank.
"No hemos cumplido con el objetivo de margen de intereses"
El presidente de Bankia ha valorado los resultados del Plan Estratégico 2018-2020, ya que se han cumplido “todos los objetivos que dependen de nuestra gestión”, como el aumento de cuotas de mercado, la contención de gastos o la reducción de los activos improductivos.
Sin embargo, ha expuesto ante los accionistas, “no hemos cumplido con el objetivo de margen de intereses, debido al fuerte impacto que sobre esta variable ha tenido el comportamiento de los tipos de interés, que ha sido radicalmente peor a lo esperado por el mercado”.
Pese a ello, se ha superado el principal objetivo del plan, el de generación de 2.500 millones de euros en tres años, y que ha alcanzado 2.932 millones, lo que en términos de ratio de capital CET1 supone elevarlo al 15,48%. El ejecutivo ha lamentado que no se haya podido distribuir esta cuantía entre los accionistas, “por el entorno supervisor y regulatorio como consecuencia de la pandemia”, pero ha puesto en valor que “esta generación de capital ha sido clave en la operación de fusión con CaixaBank”.
“Con el cierre del Plan Estratégico se pone el broche a un ciclo de transformación en la historia de Bankia”, ha explicado Goirigolzarri. En concreto, ha apuntado que la entidad ha transformado sus fundamentales financieros hasta convertirse en el más solvente entre los grandes bancos españoles”.
A su juicio, “detrás de toda esta transformación hay unos sólidos principios de gestión responsable. La gestión responsable ha formado parte de nuestro ADN a lo largo de todos estos años”. Una gestión responsable basada en cuatro pilares: principios y valores bien asentados, excelente gobierno corporativo, compromiso con la sostenibilidad y el medioambiente, y apuesta por una sociedad más justa e inclusiva.
Sobre esa base, “el equipo de Bankia ha conseguido lo que, quizás, muchos dudaban que fuese posible: convertir a Bankia en un banco sostenible, solvente y con altos índices de satisfacción por la calidad de servicio prestada por la entidad. Bankia ha pasado de ser el principal problema del sector financiero y de la estabilidad de nuestro país en el año 2012, a ser un referente dentro del sector y a contribuir de forma decisiva a la mejora socioeconómica de nuestro país en 2020”, ha puesto en valor Goirigolzarri.
En este punto, el presidente de Bankia ha hecho mención especial a los dos consejeros ejecutivos de la entidad, José Sevilla y Antonio Ortega, a los que ha agradecido su “aportación, que para mí ha sido absolutamente decisiva a lo largo de estos años”; así como al conjunto de miembros del Consejo de Administración, que “han dado un permanente ejemplo de dedicación, profesionalidad y de profunda independencia”, y a todos los profesionales de la entidad.
“Al equipo de Bankia le estoy agradecido por muchas razones, pero, sobre todo, por su ejemplo, el ejemplo que me ha dado a lo largo de todos estos años. Ejemplo de obsesión por el servicio al cliente, de profesionalidad, compromiso y espíritu de adaptación y sacrificio. Lo he dicho muchas veces, pero hoy quiero reiterarlo, para mí ha sido un enorme orgullo formar parte de este equipo”, ha subrayado.
También ha tenido palabras de agradecimiento para los clientes, “que permanentemente nos han mostrado su apoyo y confianza”, y para “los accionistas por su confianza a lo largo de todos estos años”. “Estoy seguro de que todos los que hemos vivido esta experiencia la recordaremos siempre con un tremendo orgullo, con un gran cariño y con un enorme agradecimiento”, ha añadido.