Elevada cuota de mercado, poder de fijación de precios o ser líderes en sus respectivos mercados son algunas de las variables que a menudo buscan los gestores de fondos (especialmente value) para posicionarse sobre algunas de las compañías que formarán parte de sus carteras.
Argumentos que, en parte, comparte Berenberg al hablar de las compañía que fabrican tapones de corcho, botellas de vidrio o barriles de madera. En concreto habla de los cuatro players que a día de hoy son líderes en sus mercados nicho. El fabricante de tapones de corcho Corticeira Amorim; el productor de barriles de vino TFF Group y los fabricantes de botellas de vidrio Vidrala y Verallia tienen varias cosas en común: “tienen importantes cuotas de mercado dentro de sus respectivos campos; se beneficiarán de aumentar el enfoque del consumidor hacia la sostenibilidad y la tendencia a la primación, pues el corcho, vidrio y barriles de roble están dirigidos a la parte Premium del mercado”.
Berenberg cree que la posición dominante de las materias primas – botellas de vidrio y tapones de corcho – ha disminuido en las últimas décadas. Agrega que para el corcho, la tendencia ha comenzado a cambiar ya que el material es más competitivo frente a las alternativas y, en el caso del vidrio, la reciente marea en contra del plástico puede ser un viento de cola para el sector.
Además, esta casa de análisis cree que la industria de bebidas alcohólicas está cambiando de “volumen a valor” con segmentos Premium que tienden a superar a los productos de menor valor.
El broker lanza recomendación de compra sobre los títulos de Corticeira Amorin con precio objetivo de 12 euros (potencial del 16,9%), TFF, precio objetivo de 43 euros (potencial del 16%) y Vidrala mientras que opta por “mantener” las acciones de Verallia, para la que fija un potencial del 11% al dar un objetivo de 32 euros. En el caso de la compañía española, Berenberg fija un precio objetivo de 98 euros que, sobre los precios actuales, deja un potencial superior al 14%. Una revalorización que se añade al más del 25% que ya se anota el valor español desde comienzos del ejercicio.