ENCE ha dado inicio este lunes a la parada técnica anual de su biofábrica ubicada en Pontevedra, un proceso que se extenderá hasta el 27 de septiembre y en el que la compañía tiene previsto invertir alrededor de 10 millones de euros, según ha informado la propia empresa.
Durante esta parada técnica, se estima que aproximadamente 1.600 trabajadores adicionales se sumarán a la plantilla habitual de la fábrica. Este grupo de empleados llevará a cabo un plan de trabajo enfocado en la incorporación de nuevas tecnologías y la mejora de las ya existentes en las instalaciones.
En cuanto a la distribución de la inversión, se destaca que de los 10 millones de euros previstos, alrededor de ocho millones de euros se destinarán a labores de mantenimiento para garantizar la eficiencia de la biofábrica. Los dos millones de euros restantes se dirigirán a inversiones extraordinarias con el objetivo de optimizar las instalaciones en términos de eficiencia y digitalización, manteniendo así a Ence Pontevedra como un referente en su sector.
Ence ha hecho hincapié en que durante esta parada técnica, se mantendrá un estricto control para garantizar la seguridad y la salud de todas las personas involucradas en sus operaciones. La empresa ha afirmado que se supervisará de manera rigurosa el cumplimiento de todas las medidas de seguridad dentro de las instalaciones, reafirmando su compromiso con estos aspectos fundamentales.
Impulso a la economía local
La compañía ha expresado su firme compromiso con la región de Pontevedra, destacando su apuesta por invertir y generar actividad en la zona. En este sentido, Ence ha señalado que las empresas auxiliares que participarán en la parada técnica serán de origen gallego, contribuyendo así al impulso de la economía local.
Además, servicios como el alojamiento y la manutención de los trabajadores durante este periodo serán proporcionados por empresas del entorno de la ciudad de Pontevedra, reafirmando el compromiso de Ence con el tejido empresarial de la región.
