No sólo eso, además se “premió” la nueva política de reajustes tanto en Grecia como en Irlanda y los nuevos tramos de rescate para ambos países fueron también aprobados. Por último conocimos que todo esto se coordinará de forma más estrecha con el FMI; por lo que las noticias referentes al EFSF no pudieron ser más esperanzadoras.
Más datos que nos permiten ser optimistas: la subasta de bonos de Italia fue mejor de lo esperado (subió el tipo de interés pero con una demanda muy atractiva) y la confianza del consumidor en EEUU que fue mucho mejor de lo que se esperaba (56 vs. 44).
Por todo ello, las perspectivas que nos ofrece la renta variable en el corto plazo son positivas. Alemania parece más que nunca decidida a seguir adelante con el plan de rescate europeo y eso tendrá un efecto directo moderadamente optimista sobre el ánimo de los inversores.
Con todo esto arrancamos una jornada con nuevas amenazas por parte de la agencias, en este caso ha sido S&P quien ha bajado la nota a 37 entidades financieras, entre ellas BBVA y Santander. ¿Consecuencias? Prolongamiento de la crisis del sector financiero que tendrá que incrementar aún más sus reservas para hacer frente a la nueva regulación y contentar las exigencias de las agencias crediticias.
Respecto al mercado de deuda, ayer por primera vez en tres años, el bono a 30 años alemán superó al de EEUU y los diferenciales de deuda de España e Italia volvieron a mejoras. Esta mañana se sitúan en 403 puntos (España) y 487.5 (Italia).
Hoy conoceremos la Balanza por cuenta corriente en España, la situación del mercado laboral en Alemania y Zona Euro y muchos datos macro de EEUU, de entre los que destacamos el dato de productividad, el dato de empleo no agrícola y el Libro Beige de la Fed.