De hecho, el resultado bruto de explotación (EBITDA) de la multinacional alcanzó los 1.233 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 18,3%, con una significativa mejoría en el segmento Agua Europa tras la integración de Agbar, mientras el segmento Residuos Europa registró un nivel de actividad sostenido y un incremento de los volúmenes tratados.
Asimismo, la cifra de negocio de la compañía aumentó un 11,8% respecto al primer semestre de 2010, hasta 7.376 millones de euros, con un aumento del 6,1% de la facturación en Francia y del 11,8% en Reino Unido, mientras que los ingresos en Australia crecieron un 60,3% y un 2,3% en Norteamérica. Por contra, los ingresos en España bajaron un 10,5%.