Cox, el grupo de infraestructuras energéticas y de tratamiento de aguas, presentó este lunes sus resultados de 2024, un año en el que ha registrado un beneficio neto de 59 millones de euros, un 62% más que en 2023, gracias a la puesta a punto del negocio y las eficiencias operativas alcanzadas en los últimos doce meses. El EBITDA de la compañía también ha crecido situándose en los 183 millones de euros, un 77% más que en el ejercicio anterior.
La evolución de las divisiones Asset Co y Service Co así como la puesta en marcha de la división de servicios de ingeniería y operación y mantenimiento han permitido a Cox registrar unos ingresos de 702 millones de euros con un crecimiento del 21%. Con respecto a la deuda financiera neta ha sido de 62 millones de euros.
Además, la compañía experimentó un "crecimiento rentable" y superó los 268 millones de caja y equivalentes a cierre del periodo, y el cash flow operativo alcanzó los 83 millones de euros, con una ratio de conversión del EBITDA en cash flow del 45%.
Loa resultados anuales incluyen la simplificación de la estructura operativa a través de dos divisiones: las concesiones de agua y energía se integran en la división de Asset Co; mientras que los servicios de
ingeniería y O&M de activos se agrupan en la división denominada Service Co. La compañía espera invertir más de 600 millones de euros en activos a través de su división Asset.co en el marco del Plan Apollo.
Divisiones de negocio
La división de Asset Co. registró un incremento del 33% de los ingresos, mientras que el EBITDA mejoró un 28%. Atendiendo a las concesiones operativas de agua, los ingresos aumentaron 52% más; mientras
que el EBITDA fue un 54% superior al de 2023. SEDA y AEB, las plantas de desalación ubicadas en Agadir (Marruecos) supusieron un 54% y un 15% de los mismos, respectivamente; mientras que Accra (Ghana) un 31%. Por su parte, los activos operativos de energía (incluyendo generación de energía y transmisión) supusieron un 25% más que en 2023. La planta de bioenergía en Brasil representó el 63% de los ingresos generados por los activos de energía, seguida de SPP1 en Argelia, mientras que la planta termosolar sudafricana, Khi Solar One que se incorporó al perímetro en diciembre, aportó un 2% de los ingresos y se estima que contribuirá anualmente con aproximadamente 23 millones de euros adicionales en EBITDA.
Cox ha incorporado en estos últimos meses nuevos activos. Es el caso de la expansión de la planta de Agadir, en Marruecos, con 150.000 m 3 de agua adicionales que, además, incluye el desarrollo de una planta de energía adyacente; o de otros 485.000 m 3 en Chile, a través de dos activos en propiedad. El primero de ellos, de 85.000 m3, comenzará la construcción en el año 2025. Junto a ellos, hay que sumar la entrada en operación en diciembre de la ya mencionada termosolar Khi Solar One, en Sudáfrica, así como dos nuevas concesiones de transmisión en Brasil, que entrarán en operación en los próximos ejercicios y que la compañía ha ganado a lo largo del ejercicio.
Planes para 2025
Cox prevé que los ingresos para 2025 alcancen los 1.200 millones de euros; y estima que el EBITDA se sitúe por encima de los 230 millones de euros, con ratios de deuda neta/ EBITDA inferiores a 1x; mientras que el beneficio neto se prevé en torno a los 80 millones de euros.
Desde la AssetCo. se prevé invertir más de 600 millones de euros de CAPEX en activos de agua y energía, en el marco del Plan Apollo en regiones de alto crecimiento. Además, el backlog apunta a una clara
expansión hasta los 3.000 millones de euros.
Cox continúa avanzando a pasos agigantados en el cumplimento de su plan estratégico, y reforzando su pipeline en agua y energía. La compañía está en fases muy avanzadas para conseguir más de 500.000 m3 en el año 2025 en regiones de alto crecimiento. Estos proyectos traerán asociados más de 1,3 GW de proyectos de energía vinculados a las concesiones de agua, bajo el modelo de “Energy Follows Water”.