Caixabank ha obtenido un beneficio de 726 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 42,6 % menos que en el mismo período de 2019. El fuerte descenso en buena parte viene dado por las provisiones extraordinarias de 1.161 millones de euros para paliar el impacto del Covid- 19, una dotación que se ha mantenido prácticamente invariable respecto a junio, cuando el banco ya contaba con 1.155 millones de euros "apartados".
Ciñéndonos exclusivamente al tercer trimestre, el beneficio es de 522 millones (-19%). Los resultados de este período recogen los 109 millones destinados a las prejubilaciones acordadas en febrero para 229 empleados, pero no incluyen el registro de la plusvalía por la venta del 29% de Comercia, que asciende a 420 millones, al haberse formalizado la operación a principios del cuarto trimestre.
El margen de intereses ha bajado un 2% hasta los 3.647 millones de euros, descenso que el banco atribuye a los menores tipos de interés aplicados en los créditos ICO y a la caída de la demanda en préstamos al consumo.
Por su parte, el margen bruto, antes de gastos, ha caído el 5,3% a 6.610 millones. El margen neto, por el contrario, sube gracias a que en 2019 la entidad cargó con 978 millones de euros como costes de reestructuración de plantilla, cargo que este año no ha sufrido.
Por otro lado, los ingresos core se mantienen prácticamente estables (6.158 millones de euros) y la liquidez de Caixabank alcanza los 110.729 millones de euros, con un crecimiento de 21.302 millones de euros en el año por la generación y aportación de colaterales a la póliza del Banco Central Europeo.
Recursos de clientes
En recursos de clientes, se alcanzan los 404.422 millones (+5,2% en el año), impulsados por el fuerte crecimiento de los depósitos a la vista. El crédito a la clientela bruto alcanza los 241.877 millones de euros con un crecimiento del +6,4% en el año como consecuencia, esencialmente, del aumento del crédito a empresas (+17,6%).
La ratio de morosidad se sitúa en el 3,5% (-10 puntos básicos en el año), y la ratio de cobertura se incrementa hasta el 65% (+10 puntos porcentuales en el año) tras el refuerzo de provisiones.
Caixabank ha reducido los gastos de administración y amortización recurrentes (-3,1%) tras la materialización de ahorros asociados al acuerdo laboral de 2019 y la gestión de la base de costes, con un descenso superior a la disminución de los ingresos core.
Además, ha mostrado un fuerte apoyo a las necesidades de financiación del tejido empresarial y compromiso con la sociedad. Hasta el 30 de septiembre, Caixabank ha aprobado un total de 383.768 solicitudes de moratoria de sus clientes en España, que afectan a una cartera de 11.000 millones. Además, desde el inicio del estado de alarma, CaixaBank ha concedido 51.530 millones de euros al sector empresarial, al margen de las líneas ICO, y ha desembolsado préstamos vinculados a las líneas ICO COVID-19 por un importe total de 11.944 millones de euros.
Para Renta 4, "los resultados de 3T20 en comparativa con nuestras estimaciones se han situado en línea en margen de intereses, y han superado en un 1% en margen bruto y +4% en margen neto este último apoyado por un mejor comportamiento de los gastos de explotación. Por otro lado, menores provisiones a las estimadas han llevado al beneficio neto un 35% por encima de R4e. En comparativa con el consenso se han situado un 1% por debajo en margen de intereses, y por encima en un +2% en margen bruto por mayor aportación de la línea de otros ingresos y +8% en margen neto. Asimismo, el beneficio neto ha sido un 66% inferior por las menores provisiones".