Desde la entrada de Crédit Agricole en Bankinter se especuló sobre las intenciones de la entidad gala al tomar esta posición y se habló de una hipotética guerra accionarial en la entidad, aunque el banco galo ha asegurado en diversas ocasiones que no tiene intención de lanzar una OPA sobre Bankinter, y sus resultados (el beneficio neto hasta septiembre cayó un 70%) le han llevado a congelar cualquier gran adquisición.


El Banco de España autorizó el pasado 21 de febrero a Crédit Agricole a aumentar su participación hasta el 29,99%, justo por debajo del umbral que marca la ley para lanzar una oferta publica de adquisición (OPA).