Banco Santander sigue acumulando apoyos entre los expertos del mercado. El último en llegar viene de la mano de Credit Suisse que vuelve a apostar decididamente por el valor con una ligera mejora hasta los 4,10 euros por acción desde los 4 anteriores, con recomendación de sobreponderar el valor. Que coloca su potencial mejora en un 66%. Señala la analista de la firma Pamela Zuluaga que la mejora se debe sobre todo a la política monetaria cada vez más restrictiva, ya que los expertos de Credit Suisse había elevado previamente el aumento de los tipos de interés.
Y además se trata de un nivel moderado, frente a otras recomendaciones sobre la entidad cántabra. La media de Financial Times, coloca en 4,09 euros por acción su recorrido potencial al alza y, además, de los 27 analistas que se decantan por el valor, 8 apuestan por comprar, 9 por sobreponderar, 9 más por mantener y uno por infraponderar sus acciones con recomendaciones que van desde los 5.10 euros, en el mejor de los casos hasta los 2,70 en el peor.
En Goldman Sachs, por ejemplo, lo elevan hasta los 4,90 euros por acción, mientras que Societé Generale modera ese recorrido hasta los 3,6 %, desde sus 4,10 en valoración anterior. Citi lo coloca además en algo menos, 3,5 euros de posible subida a 12 meses vista con varios puntos a su favor, como por ejemplo el peso de Brasil, el mayor en su cuenta de resultados o el margen alcista creado tras la penalización que le ha supuesto el mercado británico.
En su gráfica de cotización vemos que el valor sigue siendo el banco más penalizado del Ibex en lo que va de año con recortes que alcanzan el 14,5%. Además, acumula hasta cinco sesiones consecutivas a la baja que recortan en global un 6,6% en su precio al valor.
Mientras, la mirada de muchos inversores está puesta en su dividendo a cuenta de los resultados de este 2022, con el pago el 2 de noviembre de 0,0583 euros por acción, al que se podrá acceder hasta el 30 de octubre. A esto sumar su programa de recompra de acciones por valor de 979 millones de ellas.
No nos olvidemos tampoco de una importante posición corta que cambia de porcentajes y se ajusta a lo que marca el fondo de Ray Dalio, Bridgewater. En la actualidad, se coloca en el 0,58% de su capital.
Para el estratega de mercados Ramón Bermejo, en el caso de Santander “para que tengamos una señal alcista, hace falta que quebrantemos esta secuencia de máximos descendentes y vulneremos el nivel 2,5680 euros y se cruce en 2,5685 euros. Si el mercado no consigue superar el último máximo descendente, podríamos ir a cubrir el hueco, contra el máximo del hueco en 2,4750 euros, o contra el precio de cierre en 2,4645 euros, está situado a una distancia del 2,84%”.
En el caso del analista técnico de Estrategias de Inversión, Néstor Borrás, Banco Santander “rebota desde la última zona de soporte comprendida en torno 2,2775 / 2,3110 euros y el nivel de soporte anterior 2,324 euros, logrando vulnerar la línea de tendencia bajista de medio plazo de color negra en un cierre diario. Para tener una nueva señal de fortaleza, es necesario vulnerar el punto crítico de la potencial figura de doble suelo en 2,6860 euros”.
Además, el experto técnico de Ei destaca que “el siguiente hito sería superar la media móvil simple de 200 periodos o de largo plazo. La pérdida del nivel de soporte 2,324 euros representaría una señal de debilidad, reanudando el movimiento bajista que parte desde FEB 2022”.
Santander en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Los indicadores técnicos que elabora Estrategias de Inversión nos muestran un Banco Santander, en modo rebote, que ha mejorado en dos puntos hasta los 3 de puntuación total frente a los 10 posibles a los que puede optar el valor. En positivo se mueve la tendencia a medio plazo, que es alcista y también el volumen de negocio a largo plazo que es creciente para el valor.
En el otro lado, la tendencia a largo plazo que es bajista para el valor, el momento total, lento y rápido negativo, el volumen de negocio, que se muestra decreciente a medio plazo y la volatilidad o rango de amplitud que, en ambas vertientes, tanto a medio como a largo plazo, se muestra creciente para Banco Santander.