ACS, la constructora presidida por Florentino Pérez, declaró ayer tras el cierre del mercado un beneficio neto de 195 millones de euros durante los tres primeros meses de 2021, un 3,8% más que el mismo periodo del año pasado (188 millones de euros), impactado por la pandemia.
Sin considerar Abertis, el beneficio neto a cierre del periodo alcanza los 201 millones de euros, un 8,5% más que en el periodo comparable. "La evolución positiva de los resultados financieros no ordinarios frente al impacto negativo en el periodo comparable, así como la recuperación del área de Servicios que se vio fuertemente afectada desde el inicio de la pandemia, respaldan el crecimiento del beneficio neto".
Sin embargo, descienden las ventas hasta 6.389 millones y el Ebitda (329 millones), un 10,6% y un 4,3%, respectivamente. "La distribución de las ventas por áreas geográficas muestra la diversificación de fuentes de ingresos del grupo, donde América del Norte representa el 60% de las ventas, Asia Pacífico un 22%, Europa un 17% de los cuales España es un 11%, y el resto un 6%".
El recorte en las ventas, reza el comunicado de la compañía, se debe "al impacto del tipo de cambio, fruto de las depreciaciones de las monedas locales frente al euro. Las actividades han mostrado un buen comportamiento en general durante el primer trimestre del año. La caída de producción con respecto al periodo comparable se debe fundamentalmente al mercado norteamericano donde el primer trimestre de 2020 aún no reflejaba el impacto de la pandemia".
En cuanto al beneficio por acción de ACS, se sitúa 0,68 euros frente a los 0,62 anteriores, lo cual implica un aumento superior al 9%. El beneficio de explotación (EBIT) se situó en los 205 millones, un 7,9% menor que el año anterior y con un ligero incremento en márgenes sobre ventas. También afectado por la menor contribución de Abertis; sin este impacto, el Ebit desciende un 3,1% frente al periodo comparable.
Por otro lado, la cartera a marzo de 2021 se sitúa en 62.957 millones de euros, un 3,1% mayor que el año pasado. Ajustado por el efecto divisa la cartera total del grupo creció un 1,8% respecto al año anterior.
El grupo mantiene una posición de deuda neta en el balance de € 3.691 millones a cierre de marzo de 2021.
Cambios en la directiva y adquisiciones
Por otro lado, señala VozPópuli, el asunto más delicado de la pasada junta de accionistas de la constructora fue la votación del informe anual sobre las remuneraciones de los consejeros. Un punto que recibió un rechazo del 34% y una abstención del 9,5%.
Además, el que será presidente del Real Madrid hasta 2025, en apenas unos días cerró los frentes que tenía abiertos. Con un patrimonio de 2.100 millones de dólares, según Forbes, Florentino Pérez ha relevado al CEO de su empresa ACS, una de las constructoras más potentes en España, tras 22 años en el cargo.
Según Voz Pópuli, Florentino perdió la confianza en Marcelino Fernández Verdes al considerarlo máximo responsable de las fuertes pérdidas de 1.000 millones de euros ocasionadas por las inversiones en Oriente Medio a través de la filial australiana Cimic, presidida por el ex Ceo de ACS.
El comunicado expresa "Marcelino Fernández Verdes manifestó su voluntad de no continuar como Consejero-Delegado de la sociedad y declinó presentarse a su reelección como consejero de la
sociedad en la Junta General de Accionistas celebrada el pasado 7 de mayo de 2021".
El 7 de mayo de 2021, la Junta General de Accionistas de ACS aprobó la renovación de los consejeros independientes Carmen Fernández Rozado y José Eladio Seco Domínguez.
Además, para transformar el modelo de negocio tradicional de ACS, el madrileño cerró la venta de su división industrial (Cobra) al gigante francés Vinci. "ACS percibirá un mínimo 4.930 millones y máximo 4.980 millones de euros. Este pago se compone de un pago fijo de 4.200 millones de euros y un pago adicional mínimo de 730 millones y máximo de 780 millones de euros", se desglosa en el informe remitido a la CNMV.
Por si fuera poco, el grupo CIMIC cerró la venta (en diciembre de 2020) de una participación del 50% en el capital social de Thiess, a unos fondos asesorados por Elliott, reteniendo CIMIC el otro 50% del capital social y ejerciendo un control conjunto de la compañía