Iberdrola no termina de resurgir en el mercado. Los expertos siguen apostando por ella, pero lo cierto es que, en su devenir bursátil, impera el tono negativo. Jefferies por ejemplo apuesta por comprar el valor, con la vista puesta en su preeminencia ante las renovables. Considera que es una de las grandes ganadoras de la energía sostenible. El banco de inversión neoyorkino afirma que el mercado subestima el potencial de Iberdrola en el desarrollo de su negocio renovable.
En concreto la firma estadounidense considera que apenas presenta riesgo de cumplir con sus objetivos de potencia entre 2025 y 2030. Sus previsiones para la compañía pasan por un beneficio por acción hasta 2025 del 7%, por encima del 5% de media de consenso de mercado. Su precio objetivo, 12,7 euros por acción lo que le otorga un potencial del 18%.
En su gráfica de cotización vemos como el valor, a pesar de las recuperación superior al 5% en las últimas tres sesiones sigue goteando a la baja. Prácticamente en equilibrio en las últimas 20 sesiones y con un ligero avance en marzo, registra recortes del 7% desde el pasado 4 de enero en el mercado.
Además Iberdrola participa de inicio junto con el Gobierno y Seat ,y al que se han sumado ya también CaixaBank y Telefónica, en la primera fábrica de baterías para vehículos eléctricos de España que se levanta en Martorell .Su presidente Ignacio Sánchez Galán considera que este proyecto demuestra el potencial tecnológico del país, en una iniciativa público-privada y que se financiará con los Next Generation UE.
Además la compañía anuncia una iniciativa para instalar en la Plataforma Logística de Zaragoza un proyecto de hidrógeno verde de 10MW para abastecer al transporte pesado y al ferrocarril y que requerirá de una inversión global de 36 millones de euros y en el que participarán hasta 15 instituciones y otras empresas.
Según nos muestran los indicadores premium de Estrategias de Inversión, Iberdrola, en modo consolidación alcanza una puntuación de apenas 5 puntos de los 10 posibles. Como indicadores favorables encontramos la tendencia a largo plazo que es alcista, el momento total lento que es positivo y el volumen a largo plazo que se muestra creciente. En el negativo, tenemos la tendencia a medio plazo que es bajista, el momento total rápido que es negativo, el volumen decreciente a medio plazo y también el rango de amplitud, que en sus dos vertientes, tanto a medio como a largo plazo, es creciente.
Según el analista técnico de Ei, José Antonio González “el oscilador MACD comienza a perfilar un giro alcista, a partir de zonas de sobreventa acumulada, al tiempo que la cotización se frena a la altura del área de soporte proyectado en torno a los 10,06 / 9,91 euros por acción. A partir de aquí, comienzan a asentarse las bases para una reacción alcista tras un proceso correctivo sin descanso desde los 12,395 euros por acción, reacción que tendría como objetivo la zona de los 10,85 euros, que es aproximación a su media móvil simple de 200 periodos o de largo plazo”.
Iberdrola en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Para María Mira “ en base a una valoración por ratiosy con un BPA estimado para el cierre de 2021 de 0,58€/acción, el valor cotiza con un PER de 17,8v, con descuento frente a su ratio histórico en torno a las 14,5v en los tres últimos ejercicios y con margen de mejora frente al PER medio para las compañías del selectivo Ibex 35. Por Valor contable el mercado descuenta 1.44v para Iberdrola y 2v para las compañías que componen el selectivo español”.
La analista fundamental de Estrategias de Inversión destaca que “la rentabilidad sobre dividendo-Yield de Iberdrola (4% a precios actuales) no es despreciable, en un ejercicio en el que muchas compañías congelarán dividendo. En base a nuestra valoración fundamental la recomendación a positiva a medio/largo plazo para una compañía con calidad fundamental y buenas perspectivas de crecimiento”.