Perspectivas segundo semestre: Los inversores se enfrentan a la necesidad de equilibrar sus carteras

Este nuevo análisis trimestral de renta variable factorial de WisdomTree[1], pretende explicar el comportamiento de los factores de renta variable durante el segundo trimestre de 2022, y su posible impacto en las carteras de los inversores.

  • Los Altos Dividendos continuaron dominando, seguidos por el resurgir de la Volatilidad Mínima
  • El Valor comenzó a mostrar indicios de ralentización debido a su naturaleza cíclica
  • El Momentum y el Tamaño continuaron sufriendo
  • Las estrategias de Calidad siguieron generando resultados mixtos dependiendo de la valoración global de las carteras.
     

En julio, la agresiva subida de intereses por parte de los bancos centrales continuó desacelerando la economía global, aumentando así las probabilidades de una recesión en todo el mundo. El impacto de esta ralentización ha sido evidente, ya que las expectativas de subida de tipos han disminuido, lo cual ha llevado a una rotación de factores a favor de la Calidad y el Tamaño. De cara al futuro, la incertidumbre en torno a la recesión y el crecimiento económico continuará aumentando. Los inversores se enfrentan a la necesidad de equilibrar sus carteras entre la construcción de riqueza a largo plazo y la protección durante las recesiones económicas. Este entorno podría, por lo tanto, favorecer a las acciones con Altos Dividendos y de Calidad.

La rentabilidad en foco: el Alto Dividendo continúa dominando, pero la Volatilidad Mínima lo está alcanzando

Durante el segundo trimestre de 2022, los mercados de renta variable sufrieron una fuerte caída, lo que provocó el peor primer semestre de las últimas décadas. El MSCI World perdió un -16,2%. De forma inusual, la renta variable estadounidense perdió más que la europea, con un -16,9% frente al -9%. A los mercados emergentes también sufrieron, llegando a perder un –11,4%.

La rentabilidad por factor del segundo trimestre continuó estando impulsada por los incrementos excepcionales de la inflación y la posición restrictiva de los bancos centrales de los países desarrollados. Sin embargo, en este trimestre entraron dos nuevos participantes: la creciente volatilidad y el temor a la recesión agitaron aún más al mercado. Ante un panorama tan adverso, unos factores siguieron teniendo buenos resultados, y otros no:

  • El Alto Dividendo dominó en la mayoría de las regiones. Este factor terminó en primer lugar en todas las economías desarrolladas.
  • Impulsado por el aumento de la volatilidad y el mayor temor a la recesión, la Volatilidad Mínima se mantuvo en segundo lugar en los mercados desarrollados y en primer lugar en los mercados emergentes (MEs).
  • A pesar del aumento de la volatilidad, el Valor es el último factor que consiguió superar de forma consistente este trimestre gracias a las subidas de tipos.
  • El Momentum, el Tamaño, y el Crecimiento fueron los que más sufrieron durante el trimestre, obteniendo pérdidas en todas las regiones.
  • La Calidad se situó entre estos dos grupos, con leves pérdidas en la renta variable europea y mundial, pero superando a la renta variable estadounidense. Sin embargo, al igual que en el primer trimestre, la definición de Calidad y el criterio utilizado podrían haber tenido un gran impacto en el resultado. La Calidad, cuando no se le presta atención, tiende a inclinarse hacia el Crecimiento (los inversores, después de todo, pagan por calidad), y podría haber sufrido los efectos de dicha inclinación. Por ejemplo, las empresas muy rentables y las de crecimiento de dividendo han obtenido mejores resultados a lo largo del período, utilizando su inclinación de Valor/Alto Dividendo para obtener una rentabilidad superior.
     

Gráfico 1: la rentabilidad superior de los factores de renta variable en el 2T de 2022 en todas las regiones

Fuente: WisdomTree, Bloomberg. Del 31 de marzo de 2022 al 30 de junio de 2022. Los resultados de la rentabilidad YTD son extraídos de Bloomberg desde el 31 de diciembre de 2021 al 30 de junio de 2022. Las definiciones completas de índices pueden encontrarse a continuación. La rentabilidad histórica no es indicativa de la rentabilidad a futuro y cualquier inversión puede perder valor.

Si se examina la rentabilidad superior de los factores durante los últimos seis meses, se observa que:

Tras un fuerte comienzo, el Valor mostró signos de desaceleración en el segundo trimestre. El Valor es principalmente un factor cíclico, por lo que un entorno inflacionista con subidas agresivas de los tipos de interés es un factor muy favorable. Lo contrario sucede con el miedo a la recesión y el aumento de la volatilidad.

El Alto Dividendo es el ganador absoluto del primer semestre de 2022, ya que se ha ido fortaleciendo progresivamente.
Si bien la Volatilidad Mínima tuvo un comienzo un poco más lento durante el primer trimestre, ha acelerado su ritmo en el segundo trimestre gracias al temor de recesión.

El Tamaño y el Momentum sufrieron durante todo el semestre en un entorno que no fue propicio para las acciones cíclicas.

Y, por último, la Calidad fue la que sufrió más durante las primeras seis semanas del año, y se ha mantenido en torno al mismo nivel desde entonces. No obstante, como el mercado ha adoptado una posición más defensiva hacia el final del segundo trimestre, la Calidad está mostrando señales de vida. También en este caso, las empresas altamente rentables y de crecimiento de dividendos han tenido mejores resultados.
 

Gráfico 2: la rentabilidad superior en lo que va del año de los factores de renta variable en los mercados desarrollados

Fuente: WisdomTree, Bloomberg. Del 31 de diciembre de 2021 al 30 de junio de 2022. Las definiciones completas de índices pueden encontrarse a continuación. La rentabilidad histórica no es indicativa de la rentabilidad a futuro y cualquier inversión puede perder valor.

Cabe destacar que, desde finales de junio, la previsión de los mercados de una recesión ha seguido creciendo. Esto ha hecho que se revisen a la baja las expectativas sobre futuras subidas de tipos de interés. Los factores de renta variable han reaccionado a este cambio con bastante intensidad. La Calidad y el Tamaño han tomado la delantera este mes, mientras que el Valor y el Alto Dividendo han cedido parte de su rentabilidad. Esta rotación ha sido particularmente fuerte en Europa, donde las predicciones económicas son muy negativas. En cualquier caso, la diferencia de rentabilidad en los seis primeros meses ha sido tan elevada que el balance anual sigue siendo similar.

Las valoraciones continúan reduciéndose de manera generalizada

En el segundo trimestre de 2022 las valoraciones continuaron disminuyendo en todos los factores. El Momentum y a Calidad tuvieron las mayores pérdidas de valoración en todas las regiones. En términos relativos, las acciones de Alto Dividendo y de Valor pasaron a ser más caras frente al mercado debido a la leve caída de sus ratios de precios/beneficios.

Gráfico 3: la evolución histórica de las ratios de Precio/Beneficios de los factores de renta variable

Fuente: WisdomTree, Bloomberg. Al 30 de junio de 2022. Las definiciones completas de índices pueden encontrarse a continuación. La rentabilidad histórica no es indicativa de la rentabilidad a futuro y cualquier inversión puede perder valor.

La reapertura del comercio en 2021 se ha transformado en 2022 en el “comercio de la recesión”, por el retraso del ciclo de subida de intereses por parte de los bancos centrales. Este agresivo plan de ajuste está ralentizando la economía global y aumentando la probabilidad de una recesión en todo el mundo. Los datos del Índice Económico Líder (LEI) muestran que el impulso económico está deshaciéndose muy rápido. El impacto de esta desaceleración se ha manifestado claramente en julio, con la disminución de las expectativas de subidas de tipos, lo que ha provocado la rotación de factores a favor de la Calidad y el Tamaño. Sin embargo, el riesgo de una recesión está alimentando la incertidumbre de los inversores. Se tiene que equilibrar con cuidado el riesgo en la asignación de la renta variable. Los activos resistentes a todo tipo clima siguen siendo los que están mejor posicionados, ya que ofrecen un equilibrio entre la construcción de riqueza a largo plazo y la protección de la cartera durante las recesiones económicas. Este entorno podría, por lo tanto, favorecer a las acciones de Alto Dividendo y de Calidad.