Por Johanna Bennett
BARRON'S


Ahora que la mayoría de las empresas que componen el S&P 500 ya presentaron sus resultados del primer trimestre, es el momento de declarar victoria, o algo así. Efectivamente fue un mal trimestre. Hasta el jueves, las ganancias registraban una caída superior al 35% en comparación con los niveles de un año antes. Y los próximos dos trimestres no parecen mucho mejores. De hecho, se espera que las ganancias caigan alrededor de un 13% en 2009, a 56,57  dólares por acción, el peor resultado que haya registrado el Standard & Poor's 500 en un año desde 2003.


Pero hay algo bueno: los resultados del primer trimestre cayeron menos de lo que esperaba el mercado, proporcionando así la primera sorpresa positiva del índice desde que las ganancias comenzaron a descender en 2007. De hecho, las ganancias ponderadas por acciones de 100.500 millones  de dólares superaron en un 7,1% las estimaciones de 93.700 millones, de acuerdo a Thomson Reuters. "Después de dos años de resultados desastrosos, esto es una victoria", dijo Ashwani Kaul, director de investigación de esa firma.

Es una pequeña victoria. No obstante, resultados mejores de lo esperado en empresas como Kraft Foods, Corning y JPMorgan Chase aumentaron las expectativas de que los resultados cambiarán de dirección durante el cuarto trimestre para crecer en 2010. "Las estimaciones parecen haberse estabilizado pese a la recaída de los últimos días", dijo Bill Stone, jefe de estrategia de inversión de PNC Wealth Management. "Existe una buena posibilidad de que se registraren resultados positivos a partir del cuarto trimestre".

Los inversionistas ya cantaron victoria. Hasta hace poco, los principales índices bursátiles disfrutaban de avances vertiginosos a medida que los inversionistas favorecían las acciones financieras, minoristas y de otros sectores en problemas. De hecho, desde el 9 de marzo, el S&P ha subido un 31%, el Promedio Industrial Dow Jones un 27% y el Índice Compuesto Nasdaq un 33%. Aún así, el camino para que las ganancias vuelvan a registrar crecimiento estará "lleno de altibajos", dijo Stone.

Pero con un desempleo que sigue aumentando y la economía aún tambaleante, algunos estrategas dicen que las proyecciones son muy altas. Sin embargo, la mayoría de los analistas espera que las ganancias crezcan en 2010, pero difieren respecto de cuánto ganará el S&P 500. Thomson Reuters dice que la proyección de consenso entre los analistas de ventas es de 73,39 dólares , cifra un 29% superior a las actuales estimaciones para 2009. Sin embargo, Barclays Capital proyecta 46  dólares y Goldman Sachs, 63.

Entre los factores positivos: aun cuando la economía continúe con dificultades, las comparaciones interanuales serán bastante fáciles. Las ganancias de las empresas de consumo discrecional podrían crecer un 136% durante 2010, mientras que las de las firmas financieras podrían incrementarse un 78%.

Durante las últimas cuatro semanas, los analistas de ventas han recortado más estimaciones que las que han incrementado. Sin embargo, en comparación con las cuatro semanas anteriores, el número de incrementos se cuadruplicó, a 1.858, mientras que los recortes subieron un 50%, dijo Dirk van Dijk, director de investigación de Zacks.

"Eso significa que el pesimismo está disminuyendo", añadió van Dijk.

Por supuesto que la confianza en las proyecciones de ventas ha sido golpeada por reiteradas revisiones a la baja durante el último año. Además, la incertidumbre continúa acechando a los mercados y la economía. Pero si la mayoría de los brotes verdes que observan los alcistas no resultan ser maleza, pueden venir días mejores.