La deuda corporativa global de grado de inversión registró una rentabilidad del -1,5% durante el trimestre (índice Bloomberg Global AggregateCorporateHedgedtoUSD). Estos resultados se debieron al aumento de los tipos, ya que los mercados pasaron a descontar menos recortes de tipos de interés en el futuro, sobre todo por parte de la Reserva Federal. La reducción de expectativas viene dada por la solidez de los datos económicos en Estados Unidos y los resultados electorales de noviembre, que podrían dar lugar a políticas favorables al crecimiento y a una posible ralentización de la desinflación.
Los fundamentales corporativos siguen siendo estables y se prevé que mantengan su solidez. Los resultados de las recientes elecciones estadounidenses, con una victoria aplastante del Partido Republicano en la presidencia, la Cámara de Representantes y el Senado, podrían traducirse en un aumento del gasto fiscal, un impulso del crecimiento económico y una flexibilización de la normativa aplicable a las empresas. Los diferenciales de la deuda corporativa estadounidense de grado de inversión cayeron hasta los 74 puntos básicos, lo que provocó un importante volumen de nueva emisión tras las elecciones.
La deuda corporativa global de grado de inversión superó a la deuda pública de duración similar en un 0,9%. El diferencial del índice Bloomberg Global AggregateCorporate cerró el trimestre en 89 puntos básicos, 11 puntos menos que a finales de septiembre. En términos regionales, los diferenciales de la deuda corporativa europea de grado de inversión se redujeron en 15 puntos básicos y cerraron el trimestre en 102, mientras que los de la deuda corporativa estadounidense de grado de inversión cayeron 9 puntos y cerraron en 80. Por lo tanto, el diferencial adicional que ofrece la deuda corporativa europea de grado de inversión sobre la estadounidense se redujo en 6 puntos hasta situarse en 22.
La solidez de los fundamentales corporativos impulsa las perspectivas de la deuda corporativa global de grado de inversión. Las expectativas de crecimiento económico para los próximos seis a doce meses señalan que la deuda corporativa global de grado de inversión ofrecerá unos patrones razonables de rentabilidad y generación de rentas en línea con el nivel de rendimiento actual. Aún es posible encontrar oportunidades idiosincráticas, tanto a nivel regional, ante los mayores diferenciales de deuda corporativa europea frente a la estadounidense, como a nivel sectorial, gracias a las mejores valoraciones que ofrece el sector financiero en comparación con el industrial.
El elevado rendimiento total de la deuda corporativa global de grado de inversión sigue resultando atractivo, y la oportunidad de garantizarse los niveles actuales podría acabar pronto, lo que podría ofrecer una vía de acceso atractiva para los inversores a largo plazo. En lugar de posicionarnos para un resultado macroeconómico determinado, seguimos tratando de identificar oportunidades idiosincráticas en compañías y sectores concretos, en áreas como el sector bancario, el farmacéutico y el de los suministros públicos.