Según apunta el Índice de Confianza del Inversor, que elabora trimestralmente la gestora internacional J.P. Morgan SM, los inversores españoles comienzan a recuperar la confianza en los mercados (medido de octubre a diciembre), aunque sigue estando en un sentimiento negativo, pero mucho menor al trimestre anterior:
Además, en la encuesta se observa que son Europa y EE.UU. los mercados con mayor percepción alcista,con alzas potenciales de entre 28,7% y 28,5% respectivamente, seguido de la bolsa española (23,6%). Respecto a Asia, una cosa bastante extraña ya que la encuesta muestra que las preferencias de los inversores han caído a menos del 10% que consideran que Asia puede batir al resto de mercados, cuando es justo en la región donde se ha observado mayor optimismo como resultado de la apertura de China, pero ya veremos:
Lo anterior, se ha visto reflejado en el buen tono con que hemos empezado 2023. Basta ver las rentabilidades que acumulamos en este mes y medio, con mercados como FTSE MIB ganando 15,6% y que en la semana pasada también cerró con alzas de 1,2%, o el Ibex alegrando los bolsillos de los inversores con ganancia del 11,3%, pero que en la semana cayó 1,2% o el CAC 40 que acumula un alza del 10,3% y que cayó 1,4% en la segunda semana de febrero....
Por la parte de sectores, hay tres claros ganadores en lo que va del año:
- Tecnología +13,3%
- Consumo cíclico +12,6% y
- Serv. Telecom +11,7%
Todos ellos con caídas en la semana pasada, siendo la mayor caída en serv. Telecom -4,9%. Sin embargo, el sector energía, que el año pasado fue el claro ganador, y que acumula ganancias en el año del 3,5% gracias al alza del 4,6% en la segunda semana de febrero, con un alza semanal en el precio del brent del 8,1%, sigue siendo un sector a tenerlo en cuenta.
Además, con buena parte de los resultados empresariales ya encima de la mesa, y según comentaba Duncan Lamont, CFA y responsable de análisis estratégico de Schroders, las acciones más rentables del mundo en 2022 fueron en su mayoría empresas estadounidenses pero no fueron las siete mayores empresas estadounidenses, que por cierto, pertenecen al sector tecnológico, sino la mayoría de estas empresas con tan buenos resultados pertenecen al sector energético, con una rentabilidad del 119%, como Occidental Petroleum encabeza la lista, seguida de Hess, Exxon Mobil, Marathon Petroleum y la empresa de servicios petrolíferos Schlumberger:
El sector energía, junto con industriales son los que mayor crecimiento en beneficios e ingresos han reportado en el S&P 500, mientras que los de peores reportes empresariales fueron servicios de comunicación y materiales:
El riesgo sigue existiendo . . .
A pesar de que muchos estrategas y gestores comentan que la crisis energética en Europa está bajo control, gracias a un invierno más benigno, el problema o riesgo podría venir por el lado de haber consumido mucho de nuestros recursos almacenados de gas, excediéndose del consumo, con lo que ya sea, en verano o invierno, hay un riesgo de racionamiento desordenado, apuntaba Kevin Thozet, miembro del comité de inversión de Carmignac. Y añade que, las inversiones realizadas en Qatar, EE. UU., Azerbaiyán no estarán efectivas sino hasta 2026. "Esa es la espada de Damocles a la que nos podríamos enfrentar, aunque con una probabilidad baja en 2023, pero aumentando hacia el 2024". Entonces, por qué esperar a volver a tener problemas si la oferta sigue limitada?
Numerosos vientos de cola
El despertar de la economía China con la reapertura, generará una demanda que estaba dormida. Si las expectativas de crecimiento se materializan y el PIB crece por encima del 5%, junto con India serían los mayores contribuidores al crecimiento global en 2023, lo que significa mayor demanda de energía (llámese gas, petróleo, renovables . . . con lo que había que tomar posiciones en energéticas o mantener aquellas que arrastramos de 2022.
Martin Todd, gestor de carteras de renta variable mundial sostenible de Federated Hermes, comenta que los elevados precios habían provocado "un nuevo equilibrio" al reducirse la demanda y seguir apareciendo nuevos participantes en el mercado. Todd es menos optimista hacia las grandes petroleras europeas, ya que según su punto de vista parecen más difíciles de crecer debido a la incertidumbre en torno a la demanda, el escrutinio regulatorio y los impuestos extraordinarios. Sin embargo concluyó diciendo que para los inversores de renta variable la energía tiene un claro valor. La seguridad energética y la cohesión social siguen siendo prioritarias en todo el mundo, mientras que el despliegue de energías limpias y la innovación continúan acelerándose.
Chris Metcalfe, CIO de IBOSS, afirma que casi un año después del inicio de la guerra en Ucrania "prácticamente todas las formas de energía tendrán importantes vientos de cola". Aun que los vientos de cola "para la energía eólica, solar y de las olas proceden del impulso hacia la descarbonización, señaló, beneficiándose de subvenciones gubernamentales y recibiendo un amplio apoyo popular", añadió.
Por su parte, John Stopford, cogestor del fondo Ninety One's Diversified Income, mostró un escepticismo similar hacia las grandes empresas de combustibles fósiles, y optó por no invertir en empresas que obtienen más del 5% de sus ingresos de la extracción de carbón o la generación de energía, o de la exploración, producción y refino de petróleo y gas.
La necesidad de combustibles fósiles aún no se ha paliado, y sigue siendo una parte importante de la composición del sector energético.