Los inversores deshicieron posiciones en fondos de renta variable por más de 13.700 millones de dólares, lo que supone la mayor salida semanal de las últimas cinco.
A pesar que ahora ya conocimos el movimiento del BCE, queda por ver el que haga la FED esta semana, donde se esperan otros 75 puntos básicos. Este proceso de restricción monetaria, en la que Europa comienza su andadura vía el aumento de los tipos de referencia impactará a los activos financieros, tendrán un impacto no solo en los activos bursátiles de los inversores, pero también en sus ahorros e hipotecas. Recordemos que el mercado inmobiliario en EE.UU. estaba "sobrecalentado" y por tanto es de esperar una cautela superior entre estos inversores.
De ahí que los fondos de renta variable estadounidense registraran salidas por 8.450 millones de dólares, mientras que los de renta variable europea fueron de 5.600 millones de dólares. Algunos de estos inversores decidieron apostar por la liquidez/monetarios, mientras que por otro lado se ha visto apetito por la renta variable asiática que registró entradas netas por unos 740 millones de dólares.
Esta cautela también imperó en los fondos de renta variable emergente, ya que la caída en el precio de algunas materias primas (desde máximos) aunado a incertidumbre política en algunos de estos países hizo que los inversores vendieran unos 2.040 millones de euros, lo que representa la mayor salida en las últimas 10 semanas, que terminó también afectando a los fondos de renta fija con salidas de 2.130 millones semanales.
En cuanto a fondos sectoriales, los de consumo discrecional, metales y minería registraron también salidas del orden de 995 millones, 445 millones y 416 millones de dólares respectivamente, cuando el sector salud (tan afectado en los primeros cinco meses del año) registaron entradas netas por 511 millones.
En cuanto a los bonos globales, las ventas continuaron también esta semana, deshaciendo posiciones por valor de 6.900 millones de dólares, siendo los bonos gubernamentales de medio plazo los de mayores salidas (2.490 millones), mientras que los fondos de bonos de corto plazo se dedujeron hasta un mínimo de 15 semanas de 1.880 millones de dólares.
En cuanto al oro "activo refugio que no ha sido refugio", las ventas netas en los fondos de oro y metales preciosos se situaron en 1.100 millones de dólares, un 63% más de salidas que la semana anterior, mientras que los fondos de energía registraron una cuarta salida semanal, por valor de 180 millones de dólares.