En el mundo de la inversión, la historia nos enseña que los mercados financieros se mueven por ciclos. A veces, los inversores huyen del riesgo y se refugian en activos más sólidos, como las large caps, las grandes compañías consolidadas. Otras veces, el viento cambia y las small caps, esas empresas de menor capitalización bursátil empiezan a brillar.

Desde verano del 2024 venimos hablando en numerosos artículos sobre la importancia de fijarse en compañías de menor capitalización. Esto no viene de ayer. Los motivos que hemos venido argumentando siguen siendo válidos; es más, se están reforzando. Hoy me quería fijar en dos.

El primero hace referencia a la valoración, de la cual ya hemos hablado, pero con un gráfico nuevo. El gráfico que he preparado nos muestra la valoración relativa de las large caps frente a las small caps. Durante los últimos años, las grandes compañías han dominado los mercados, impulsadas por su estabilidad y su capacidad de generar beneficios. Sin embargo, hay varios factores que indican que el ciclo puede estar girando a favor de las empresas más pequeñas. Como ya sabemos, el entorno macro, las bajadas de tipos… y la valoración. Nunca hemos tenido una oportunidad de valoración con respecto a las grandes como ahora. 

Es cierto que las small caps tienden a ser más volátiles. Son empresas más jóvenes, con menos acceso a capital en tiempos de crisis y con modelos de negocio que aún pueden estar en fase de consolidación. Pero ahí es donde reside su atractivo: cuando el mercado se vuelve favorable, estas compañías pueden experimentar un crecimiento explosivo, superando ampliamente a las grandes corporaciones en términos de rentabilidad. Un ejemplo clásico es el período de recuperación tras la crisis de 2008, donde las small caps no solo recuperaron terreno más rápido que las large caps, sino que también ofrecieron retornos mucho más elevados en la década siguiente. Lo mismo ocurrió tras la burbuja puntocom de los años 2000. En ambos casos, aquellos que apostaron por empresas pequeñas cuando nadie les prestaba atención fueron los grandes beneficiados.

Fuente: Carlos Arenas Laorga

El otro motivo también lo hemos comentado en otras ocasiones, pero ya se está materializando. Me refiero a los aranceles. Las compañías menos grandes se ven menos perjudicadas, por el simple hecho de que sus exportaciones son un 76% menor que las grandes (en Europa). Y en Estados Unidos hay casi un 20% de diferencia entre los renevues que vienen del propio país entre el S&P y el Russell. Y eso que el S&P tiene muchas medianas. 

Fuente: Carlos Arenas Laorga

Para aquellos que buscan crecimiento y están dispuestos a asumir algo más de riesgo, las small caps pueden ser una de las grandes oportunidades. Y otro dato: aunque aporten mayor volatilidad por sí mismas, estas compañías pueden reducir la correlación total de una cartera, aportando una menor volatilidad total. De hecho, en la cartera de fondos de Estrategias de Inversión, al suscribir un fondo de small caps americanas, hemos reducido la volatilidad tota, y eso que el cambio lo hemos hecho desde un fondo de ¡renta fija euro corto plazo!