En la actualidad, mostramos preferencia por el crédito de grado de inversión de mayor calidad, ya que pensamos que este segmento ofrece un mayor valor relativo gracias a la reducción de los diferenciales. El diferencial entre los títulos con calificación A y Baa es muy reducido en términos históricos, lo que significa que los inversores están recibiendo una escasa compensación por el riesgo de crédito adicional.

Las consideraciones de valor relativo también parecen aconsejar el crédito de grado de inversión frente al de alto rendimiento, ya que los diferenciales están próximos a los niveles más bajos de los últimos veinte años.

No obstante, nuestros analistas consideran que el atractivo nivel de rendimiento, la mayor calidad crediticia del índice y la duración relativamente corta de la deuda estadounidense de alto rendimiento, ofrecen una buena diversificación de carry a las carteras mixtas.

Existen características atractivas en la deuda global de grado de inversión, a pesar de unos niveles iniciales de diferencial relativamente reducidos. «La clase de activos es muy amplia y profunda, con un universo de inversión de unos 12 billones de dólares y algo menos de 17.000 títulos individuales. Por lo tanto, aun cuando las valoraciones parezcan ajustadas a nivel de índice, ello enmascara una gran dispersión, y aún identificamos numerosas y atractivas oportunidades de inversión».