Los mercados primarios también se están reabriendo con precios atractivos y un número creciente de bonos vinculados a la sostenibilidad (SLB) muestra el compromiso de los emisores de mejorar sus perfiles ASG. Desde ese punto de vista, 2024 será un año dinámico con muchas oportunidades para el crédito ISR.
Favorecemos los bonos a medio plazo -entre dos y cinco años de vencimiento- y preferimos el crédito intermedio de calidad, como las calificaciones BBB y BB cruzadas, que ofrecen un valor interesante. Junto con fuertes requisitos en términos de inversión sostenible y las diversas etiquetas ISR -Hacia la Sostenibilidad (Bélgica), Umweltzeichen (Austria), la etiqueta ISR de Francia, FNG (Alemania)- esta combinación permite cumplir objetivos extrafinancieros.