En 2023 se cumplen 30 años de la creación de ETF en EE.UU. El primer ETF cotizado en EE.UU., el SPDR S&P 500 ETF (SPY), se lanzó el 22 de enero de 1993, y actualmente ocupa el trono de los ETF con 353.000 millones de dólares en activos.  Los dos siguientes ETF más grandes también siguen al S&P 500:  el iShares Core S&P 500 ETF (IVV) tiene 288.000 millones de dólares en activos y el Vanguard S&P 500 ETF (VOO), 279.000 millones.  

En 2022, la correlación a la baja predominó a lo largo del año, con el S&P 500 bajó más de un 18%, la renta fija general estadounidense experimentó una pérdida histórica del 13%, y casi todas las demás clases principales de activos se situaron en números rojos.  A pesar de ello, los ETF registraron unos 600.000 millones de dólares en entradas, el segundo mejor año de su historia.  En 2021, los ETF tocaron a la puerta del billón de dólares con más de 900.000 millones en entradas.  El sector de los ETF también registró un volumen récord de negociación y opciones, con lanzamientos casi sin precedentes y nuevos participantes de renombre.


Los impresionantes flujos de entrada de 2022 se produjeron a pesar de que el 85% de los ETF de renta variable y el 80% de los ETF de renta fija registraron descensos en el año.

Los primeros ETFs de un solo valor vieron la luz

Los primeros ETF sobre un único valor debutaron en julio con el lanzamiento por parte de AXS Investments de un conjunto de productos ofreciendo exposición apalancada e inversa a valores como Tesla. Otros emisores, como Direxion y GraniteShares, también entraron rápidamente en el juego. Algunos emisores incluso intentaron utilizar el envoltorio de los ETF para eludir los requisitos de cotización de los ADR. Todo ello a pesar de que FINRA propuso nuevas normas sobre "productos complejos" y que la SEC desaconsejó públicamente su uso de dichos ETFs,

Pero también en agosto se listaron los primeros ETFs de bonos individuales del Tesoro, habiendo superado los 400 millones de dólares de activos.

La estrella se lo llevó el COWZ

El Cash Cows Index Strategy COWZ, que se enfoca en compañías estadounidenses con el mayor rendimiento de flujo de caja libre, que es el flujo libre de caja dividido entre el valor de la empresa (capitalización de mercado + deuda - efectivo). Este ETF fue creado por PACER ETFs y que a un año alcanza una rentabilidad de -061%, mientras que en lo que va de 2023 supera el 4%, cuando el Russell 1000 Index ronda el 2%. COWZ comenzó el año con unos 1.250 millones de dólares en activos, cerrando 2022 con más de 10.000 millones de dólares.

Otro ETF que vale la pena comentar es el DBMF, ofrecido por iM Global partners, y que provee exposición a acciones, bonos, divisas y materias primas. Es un fondo de gestión activa, y no sigue a un índice. "Inició 2022 con cerca de 60 millones de dólares en activos y terminó con casi 1.000 millones, y con una rentabilidad del 22% mientras que el resto de activos cerro con números rojos", apuntaba Eric Balchunas de Bloomberg.

En 2023 es de esperar que la Renta Variable se mantega bajo presión, con los beneficios empresariales revisados a la baja, lo que podría poner un tope a las entradas en ETFs de Renta Variable (a pesar de que en 2022 registraron entradas en torno a los 400.000 millones de dólares). Sin embargo, existen opciones de inversión incluso ahí, como puede ser ETFs de dividendos, de sectores como salud, innovación, lujo, por mencionar algunos.

En cambio, todo apunta a que la renta fija podría registrar fuertes entradas, para marcarse un año histórico, ya que ahora hay rentabilidad con tipos positivos, de entre 4%, 5% e incluso un 8%, dependiendo de la clase de activos y con un riesgo relativamente controlado:

También creemos que aquellos ETFs que sufrieron más durante 2022 por vivir a la sombra de un dólar fuerte, como son los mercados emergentes, 2023 podría ser el año para este tipo de activos, sobre todo, considerando que China podría volver a ser uno de esos mercados que vuelvan al radar de los inversores. Al menos, ha empezado el 2023 con pie derecho, y esperemos que la reapertura de las fronteras y las medidas impulsadas por su presidente para paliar la difícil situación de algunos sectores, reactive a la segunda mayor economía y mercado finaciero a nivel global.

Si esto fuera verdad, la demanda por materias primas podría seguir su tendencia alcista, con una demanda del dragón asiático, con lo que a mirar especialmente aquellos commodities en los que China juega un papel de demanda importante, como podría ser el cobre, mineral de hierro, soja e incluso petróleo.

La otra cara de la moneda, salidas en fondos mutuos en 2022

Mientras tanto, los fondos de inversión experimentaron salidas récord, con una enorme diferencia de más de 1,5 billones de dólares entre los flujos de ETF y los de fondos de inversión. 2022 puede pasar a la historia como el año en que los fondos de inversión cedieron oficialmente el testigo a los ETF como vehículo de inversión preferido.

A pocos meses de su aniversario, y a pesar del brutal año que vivió el mercado de renta fija, con caídas de doble dígito, los ETFs de renta fija registraron flujos por cerca de 185.000 millones de dólares a pesar .  Por otra parte, los inversores retiraron casi 500.000 millones de dólares de los fondos de inversión de renta fija. 

Los menores costes, la eficiencia fiscal, la negociabilidad intradía y la transparencia están impulsando el cambio de formato de los fondos de inversión a los ETF... que claramente se está acelerando.

Un año en el que Rusia fue suspendido y cerrado

La invasión de Ucrania por Rusia en febrero provocó sanciones económicas masivas contra el país, cuyos mercados financieros dejaron de funcionar correctamente. Inicialmente, los ETF rusos siguieron cotizando durante la agitación, aunque la falta de creaciones provocó la aparición de grandes primas. Finalmente, las bolsas estadounidenses interrumpieron por completo la negociación de estos productos, que se han reducido prácticamente a cero y ahora se están liquidando.