¿Qué impacto puede tener en los mercados la llegada de Trump y las políticas económicas que va a aplicar?
El impacto que ha tenido en los mercados la llegada de Trump ha sido prácticamente similar a cómo evolucionaron cuando llegó Trump en 2016. Es decir, los activos de riesgo subiendo, principalmente las small caps y aquellos sectores que se van a haber beneficiados de una menor presión regulatoria y, por otro lado en la renta fija, las curvas de los tipos de interés también han subido, tanto los tramos cortos como los tramos largos, debido a ese posible temor a que sus políticas económicas sean inflacionistas.
Hay que tener en cuenta que hay tres medidas que van a tener un impacto económico y que los mercados van a vigilar muy de cerca. Uno de ellos es el tema de los aranceles a todas las importaciones que lleguen a Estados Unidos y eso, probablemente, el mercado esté descontando que genere inflación, pero hay que tener cuidado porque pueden ser recesivas o incluso deflacionistas. Por otro lado, el tema de la bajada de impuestos a las empresas, que eso va a tener un impacto a corto plazo desde luego en el crecimiento del país y, sobre todo, en el crecimiento de los beneficios por acción de las empresas, pero también va a tener una sobreestimulación de la demanda y también puede generar inflación. Y el tercer aspecto que hay que tener en cuenta que va muy ligado al mercado laboral es la expulsión de los inmigrantes, 10-11 millones de inmigrantes en Estados Unidos que hoy en día ayudan a reducir esa inflación salarial y ayudan a reequilibrar el mercado laboral. Por lo tanto esas son medidas a las que se les va a prestar mucha atención y mirar muy de cerca.
Frente a los posibles cambios en las políticas monetarias globales, ¿qué impacto podría tener en la renta fija y qué estrategias pueden optimizar el rendimiento en este entorno?
Es cierto que las políticas monetarias de los principales bancos centrales están en una trayectoria de relajación y eso es debido a que la inflación está cayendo, en algunas regiones más que en otras, pero desde luego la inflación está cayendo de manera sostenida y las políticas monetarias están relajándose. Nosotros en ese sentido, lo que sí que vemos es mucho más atractivo, en la parte corta de la curva de tipos de interés, la renta fija contamos con duraciones más cortas porque las duraciones más largas ya están llegando o ya han llegado a su punto más de sostenibilidad de largo plazo. Es decir, pensamos que ya hay poco recorrido de apreciación en las partes largas o los tramos largos de la curva de los tipos de interés y por lo tanto nos centramos más en las partes cortas.
Bien es cierto que los tramos largos pueden volver a ponerse atractivos si realmente hay una desaceleración económica a nivel mundial. Nosotros por eso estamos muy centrados en lo que es renta fija corporativa y sobre todo en Europa y renta fija corporativa de grado de inversión más que high yield. Pensamos que el binomio rentabilidad/riesgo que ofrece la renta fija corporativa con grado de inversión es mucho más atractiva y, además, nos puede servir de protección si realmente hay una desaceleración económica importante. Por lo tanto es donde nos centraríamos y de hecho nosotros estamos reforzando las soluciones que estamos ofreciendo a nuestros inversores en el mercado español, puesto que acabamos de registrar también un fondo de nuestra casa matriz muy centrado en lo que es renta fija crédito con un enfoque de retorno absoluto.
En cuanto a la renta variable, ¿cuáles son las tendencias clave que los inversores deberían observar?
En el corto plazo los inversores están muy centrados en todo lo que es la renta variable americana. Ahí hay muchísimos flujos que están entrando a lo largo del año, pero en estas últimas semanas desde la llegada de Trump la cantidad de flujos que están entrando hacia renta variable americana es brutal, hay muchísima liquidez y eso hace que también los flujos vayan ahí, pero también, lógicamente, está generando que haya valoraciones mucho más tensas, mucho más elevadas y además que haya mucha concentración. Por lo tanto sería interesante mirar hacia otros sectores como es el caso de las small caps y por eso también está entrando en Estados Unidos mucho dinero en ellas.
Si nos fijamos más a largo plazo, desde luego el gap que hay de rentabilidad entre la renta variable americana y la renta variable europea es abismal en lo que va de año y por lo tanto las valoraciones de las compañías europeas son mucho más atractivas a largo plazo. Hay que prestar mucha atención a esto porque una cosa es la economía europea y otra cosa son empresas europeas que además tengan exposición a Estados Unidos o incluso Asia y a China en particular, que si realmente los estímulos que está aplicando el gobierno chino hacen que la economía china vuelva a crecer de manera dinámica, Europa se va a ver beneficiada sin ninguna duda y Alemania en particular, que también tiene mucha exposición a China y estamos viendo cómo la economía alemana está sufriendo. Por lo tanto, a corto plazo los flujos, insisto, van a la renta variable americana, pero a largo plazo el potencial de la renta variable europea es más atractivo.
Las small caps americanas llevan subiendo mucho desde la llegada de Trump al poder, ¿qué esperan de las small caps europeas?
Lo primero que hay que decir es que las small caps, en general, son una opción de inversión muy atractiva para tener en cartera y, además, para tener en cartera de manera estructural porque es un diversificador de nuestra cartera, pero en Europa en concreto, porque estamos viendo que, efectivamente, las small caps en Estados Unidos están corriendo mucho porque están entrando mucho flujo hacia ellas por la llegada de Trump pero y Europa se está quedando un poquito atrás. Eso hace que sea muy atractiva la inversión en small caps europeas para medio/largo plazo por cuatro razones principalmente.
La primera es por un tema de rentabilidad. Es decir, la brecha de rentabilidad entre las large caps europeas y las small caps europeas está en máximos históricos, nunca ha habido tanta diferencia entre la rentabilidad de las large caps y las small caps, por lo tanto debería a medio largo plazo converger esa brecha. Segundo la valoración. La valoración de las small caps europeas está hoy en niveles mínimos históricos. Generalmente las small caps europeas cotizan en su valoración con una prima en torno al 20- 30% y hoy es al revés, por lo tanto esa brecha también en valoración las hace muy atractivas. El tercer punto son los flujos. Empiezan a entrar flujos otra vez en small caps europeas. Están viniendo por parte de los institucionales, luego vendrán por parte de los retails, pero esa llegada de flujos al igual que la salida de flujos afecta a las small caps su entrada las beneficia positivamente. Y por último, el tema del entorno económico en el que estamos. Políticas monetarias más relajadas, es decir, bajando tipo de interés, inflación bajando también, por lo tanto eso es caldo de cultivo para los activos de riesgo en general, pero para las small caps en particular y sobre todo insisto en Europa por estos aspectos que he comentado anteriormente.