"Salud e IA, oportunidades de inversión" es una mesa redonda desarrollada dentro de la Jornada "Inversión en Salud e Inteligencia Artificial: imaginando la nueva medicina" organizada recientemente por el colegio de Médicos de Zaragoza, en colaboración con Singular Bank. Desde Bellevue Funds (LUX) SICAV y Allianz GI, junto con Self Bank, resaltaron la importancia que va a adquirir la megatendencia de la disrupción tecnológica en el sector salud, que potenciará las posibilidades de numerosas compañías en aspectos como el desarrollo de la I+D, el tratamiento y diagnóstico o la reducción de costes administrativos. Y, siempre, con el foco puesto en el paciente, que será el más beneficiado.
La jornada fue coordinada por Juan Calatayud Pérez (Jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza. Vocal Medicina Privada del Colegio de Médicos de Zaragoza) y Lola López Castellot, miembro de la oficina de Banca Privada de Singular Bank de Zaragoza.
La primera mesa se centró en el debate sobre cómo podrá la IA reducir en la práctica la frecuencia de errores médicos y mejorar la precisión diagnóstica y en ella participaron Diego Gutiérrez Pérez (Catedrático de Informática e Ingeniería de Sistemas de la Universidad de Zaragoza. Grupo de investigación Graphics & Imaging Lab), Lucas Martín Gago (Fundador de Generative Intelligence. Finalista de XPRIZE y ganador de un NASA Centenial Challenge) y Aroa Vivanco (Responsable Nacional de Soluciones Digitales Relyens).
Como destacó Lola López Castellot, para que cualquier proyecto cristalice con éxito, es necesario que existan inversores que apoyen las iniciativas. Asimismo, recordó que la misión de un buen asesor es cuidar de la salud de las inversiones de sus clientes, reflexión que dio paso a la segunda mesa de debate, enfocada en cómo invertir en Salud e Inteligencia Artificial a través de fondos de inversión.
La mesa, que moderó Victoria Torre (Responsable de oferta digital de Self Bank, la banca digital de Singular Bank), contó con gestoras de primer nivel: Juan Pedro Morenés (Director de Desarrollo de Negocio de Allianz Global Investors) fue el encargado de compartir con los asistentes la relevancia que tiene la Inteligencia Artificial desde el prisma del inversor, mientras que Asís Maestre (Director de desarrollo de negocio de Bellevue Funds (LUX) SICAV) aportó la experiencia y conocimiento de sus expertos en la gestión de fondos del sector salud.
Uno de los aspectos en los que hubo unanimidad a lo largo del debate es que, en los últimos años, se ha producido una interrelación entre tendencias que ha supuesto un importante cambio de paradigma. Es difícil, en el momento actual, considerar a las megatendencias como compartimentos estancos, ya que existe una profunda interconexión entre ellas. El entronque entre la salud y la IA, la Inteligencia Artificial es, para los tres invitados de esta mesa redonda, un nuevo paso que abre fronteras invisibles y que supondrán un salto cualitativo exponencial para el sector, con su reflejo, además, en los mercados financieros.
Para Asis Maestre, Director de Desarrollo de Negocio de Bellevue Funds (LUX) SICAV, todas las compañías capaces de poner a la IA en el centro de su negocio tendrán una clara ventaja competitiva frente al resto. Destaca, además, que la salud será una de las industrias que mayor beneficio puede obtener de la aplicación de la IA. En concreto, el experto, en referencia a un estudio de PwC, asegura que son varios los motivos para apoyar esta idea: en primer lugar, la tecnología será clave en la reducción de errores e ineficiencias, mientras que, por otro lado, ayudará a que se potencien los procesos innovadores, como el desarrollo de los medicamentos.
La innovación tecnológica afecta a todos los ámbitos de la economía y el sector sanitario no es distinto. Dicha innovación extiende sus ramas por infinidad de subsectores dentro del mismo, citando algunos ejemplos como la telemedicina, el Big Data para detectar enfermedades y anticiparse a su desarrollo, la realidad virtual o aumentada a la hora de llevar a cabo operaciones quirúrgicas, la robótica o la impresión 3D. Es posible detectar ya, en el momento actual, una pequeña prima entre las empresas que sí usan la IA y las que no, y esta tendencia irá a más, sin duda. La inteligencia artificial es un viento de cola favorable para el sector salud.
Juan Pedro Morenés, Business Developer en Allianz GI afirma categórico que no se puede pensar en salud sin la IA. Se prevé que la IA, según algunos estudios, va a contribuir al crecimiento global en 15,7 billones de dólares hasta 2030, lo que casi supone el PIB de toda la economía china. La transversalidad es una de las características principales de la IA, desde el sector salud hasta otros sectores, como el agrícola. A la hora de invertir, una de las dudas que pueden tener los inversores es hasta qué punto una compañía está expuesta a una temática; en este sentido, existen varias formas de medir la pureza de una compañía hacia una megatendencia, pero una de las más utilizadas es analizar el porcentaje de ingresos de la empresa que proceden de la misma. No obstante, es importante entender que la IA no solo es disruptiva por el lado de los ingresos sino también de los costes, ya que permite una optimización esencial de los recursos utilizados. La IA está dando la vuelta al sector salud, avances significativos en múltiples aspectos.
Victoria Torre, responsable de Oferta Digital en Self Bank by Singular Bank, hace hincapié en que, desde el punto de vista de un inversor, las megatendencias son un pilar esencial para la inversión. Si somos capaces de detectar cuáles son los motores de crecimiento futuro, estaremos dando los pasos correctos para construir una cartera de éxito en el largo plazo.
Hay muchas otras megatendencias que tienen una alta relevancia. Pero, tal vez, cuando hablamos de salud, existe ese trasfondo humano que hace que nos sensibilicemos especialmente con ella. En todo este proceso, el mayor beneficiado tiene que ser el paciente, más allá de la dimensión económica. Solo tenemos que pensar en los cambios que puede traer la IA en temas como los diagnósticos médicos, la telemedicina, la interpretación de las radiografías o la medicina preventiva, personalizados con la genética. Y, si esto es relevante en los países desarrollados, extrapolemos el radical cambio que podría suponer en países del tercer mundo. Sin olvidar otros factores, como la eficiencia hospitalaria o los procesos de las UCIS, que podrían experimentar mejoras significativas.
Al margen de su relación directa con la tecnología, existen otros argumentos por lo que podría ser interesante incluir el sector salud dentro de la cartera:
1) Resiliencia del sector. Estadísticamente, se observa que el sector salud se muestra, en momentos de retrocesos bursátiles, más resistente que los indicadores globales de renta variable en los últimos 20 años. Así, hemos visto caídas del MSCI World en la crisis financiera de un 65%, mientras que el sector salud retrocedía un 35%. En 2022, en un contexto muy adverso tras la guerra de Ucrania y subidas abruptas de la inflación, aguantó las caídas mucho mejor que otros sectores. En este sentido, en muchas ocasiones se considera un sector defensivo.
2) Vientos de cola dentro del sector. Apoyado por diversos factores. Primero, el envejecimiento de la población, que tiene múltiples implicaciones. Se estima que, en 2025, 1 de cada 5 personas en el mundo tendrán más de 65 años, siendo un segmento con un poder adquisitivo elevado y que se espera que triplique el gasto en salud; la demanda, pues, es una de las claves. En segundo lugar, no podemos dar de lado la repercusión que tiene la innovación, que facilita que los ensayos clínicos suban y los costes bajen.
3) Doble vida de los fármacos GLP1, el medicamento desarrollado para los diabéticos para disminuir el azúcar en sangre, que se estima que en 2030 podría alcanzar un mercado de 35.000 millones$; habida cuenta de su utilización en tratamientos para adelgazar, supone un mercado amplificado de hasta 100.000 millones. Todas estas tendencias harán interesante invertir en ellas a través de fondos de inversión.
Juan Pedro Morenés, Business Developer en Allianz GI señala que invertir en IA provoca exposición hacia la mayor fuerza disruptiva que tenemos por delante para las próximas décadas, y que dejará atrás otras revoluciones tecnológicas tan importantes como Internet. La IA no solo beneficiará a las empresas directamente relacionadas con la misma, sino que podemos encontrar a los ganadores entre empresas de otros sectores bien distintos que han sabido aprovecharse de la misma para cambiar sus modelos de negocio. Podríamos hacer referencia al “darwinismo corporativo”: no triunfará el más fuerte ni el más guapo, sino el que mejor se adapte a la situación; ese será el que sobreviva en el futuro. Es más que probable que las empresas que incorporen IA a sus modelos de negocio sean las que ganen cuota de mercado y, las que no lo hagan, podrían verse en serias dificultades.
Cuando hablamos de tecnología o, más concretamente, IA, una de las principales preocupaciones del mercado es si la implementación de la misma puede tener un impacto negativo en el mercado laboral. Asís Maestre, Director de Desarrollo de Negocio de Bellevue Funds (LUX) SICAV considera que la IA va a suponer un cambio en la forma de trabajar de todas las industrias; en salud, supondrá una auténtica revolución en temas de I+D, en tratamiento y diagnóstico, en temas de reducción de costes administrativos (se estima que podrían reducirse un 25% de las tareas administrativas de los profesionales sanitarios) … Pero, en ningún caso, esto sustituirá la experiencia, habilidades o la sensibilidad humana. El experto no quiere dejar de comentar que la IA supone avances espectaculares, pero también importantes retos; uno de ellos está relacionado con ciertas implicaciones éticas, por los datos ingentes que se manejan y sus usos. Los profesionales sanitarios deben ser muy conscientes de cómo recopilar y usar de forma responsable esa información
Solo podemos llegar a una conclusión después de esta mesa de debate: los avances de la IA son admirables, pero en ningún caso debe olvidarse lo más importante que subyace en su interrelación con el sector salud: contribuir a un mundo mejor, más justo, más saludable. No olvidemos que, dentro de lo que pedimos a la vida (Salud, dinero y amor), la salud va siempre en primer lugar.
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