¿Puede seguir bajando su valoración? Las compañías de pequeña capitalización, es decir, aquellas compañías con una capitalización de mercado inferior a 6.000 millones de dólares, han cotizado con los niveles de valoración más bajos de los últimos veinte años en relación con las grandes empresas. Estas valoraciones históricamente bajas se deben al periodo de subidas de tipos de interés, así como al entusiasmo del mercado por las grandes tecnológicas estadounidenses.
Sin embargo, los datos históricos nos demuestran que estas compañías podrían resurgir. Según MSCI, las compañías de pequeña capitalización han superado a las de gran capitalización en aproximadamente el 70% de los periodos móviles de tres años registrados desde el año 2000, lo que convierte a la clase de activos en una fuente importante de rentabilidad.
«La diferencia de valoración entre las compañías grandes y pequeñas es una de las mayores que hemos visto nunca», afirma el gestor Julian Abdey. «Hay numerosas compañías innovadoras que muestran una valoración razonable en comparación con las compañías de mayor tamaño. Creo que ciertas empresas de pequeña capitalización podrían comenzar a remontar».
Hay varios factores catalizadores que podrían impulsar un cambio de tendencia. La reindustrialización de Estados Unidos, derivada de la desglobalización y la construcción de centros de datos de inteligencia artificial, exige una inversión masiva. Los fabricantes de sistemas de calefacción, ventilación y refrigeración han registrado una creciente demanda de sus productos. Además, las políticas de desregulación y favorables al crecimiento que previsiblemente aplicará el nuevo gobierno de Trump podrían favorecer también a las compañías estadounidenses de pequeña capitalización.