Orla Garvey, Gestora Senior de Cartera de Renta Fija de Federated Hermes Limited
Es probable que el BCE inicie su ciclo de flexibilización la próxima semana, con un recorte de 25 puntos básicos ampliamente anticipado. Los mercados de tipos ya lo tienen prácticamente previsto, pero lo que venga después del próximo recorte de tipos será más difícil de comunicar para el BCE y de valorar para los mercados.
Si bien se han logrado avances significativos en el retorno de la inflación al objetivo, desde los máximos del 10% en 2023 hasta el 2,4% de abril, es probable que la trayectoria de la inflación en el futuro sea más turbulenta. Si esto se combina con una mejora de las perspectivas de crecimiento en la zona euro, los mercados podrían tener menos confianza en la trayectoria futura de los tipos de interés básicos del BCE e inclinarse por algunos recortes en 2025, como ha ocurrido en las últimas semanas.
Louise Dudley, Gestora de Cartera de Renta Variable Global de Federated Hermes Limited
Esta semana hemos asistido al regreso de un mercado recudido, ya que los semiconductores han rugido mientras la mayor parte del mercado languidecía en la incertidumbre macroeconómica. Aunque todavía quedan muchos interrogantes sobre la adopción a gran escala y la monetización de la IA, el espacio de los chips ha tenido un gran éxito. La hambrienta demanda de chips de alta calidad en megacapitales y centros de datos sugiere que la implantación a mayor escala de estos modelos está en el horizonte. Sin embargo, es necesaria una buena dosis de escepticismo, ya que la IA lleva un tiempo siendo una palabra de moda. El camino desde la implantación hasta la rentabilidad debe tener sentido.
A pesar de la sobrecarga macroeconómica, siguen apareciendo oportunidades en todos los ámbitos. Esperamos que las empresas sólidas con una rentabilidad creciente y un crecimiento razonable a una valoración atractiva obtengan mejores resultados. A medida que los mercados asumen la hipótesis de unos tipos de interés más altos durante más tiempo, observamos una dispersión de las oportunidades por zonas geográficas. Mientras que en EE UU el impulso está haciendo subir las valoraciones, los valores europeos empiezan a parecer baratos, sobre todo por su rentabilidad por dividendo. Vemos la sostenibilidad como beneficiaria a largo plazo de un entorno macroeconómico estabilizado y creemos que el capital paciente se verá recompensado aquí.
James Cook, Director de Inversiones en Mercados Emergentes de Federated Hermes Limited
Se dice en voz baja, pero, a pesar de un mar de sentimientos negativos, la renta variable de la segunda economía más grande del mundo se ha mantenido firme en los últimos meses. El índice MSCI China cotizó plano en el primer trimestre, pero muy lejos de sus mínimos de principios de trimestre, con una ganancia aproximada del 26% desde finales de enero, superando a la mayoría de los mercados desarrollados y emergentes.
Un factor clave que ha impulsado la recuperación de China ha sido el reciente aumento de los beneficios para los accionistas a través de dividendos y recompras, inicialmente en las empresas estatales, pero también cada vez más en las empresas privadas. Esto no sólo proporciona un fuerte apoyo a la valoración, sino que también constituye un argumento convincente para la inversión en renta variable en un entorno de bajada de tipos. Hay que tener en cuenta que, mientras otros países se enfrentan a la inflación, China está sufriendo deflación. Esto hace que la renta variable resulte atractiva para los inversores nacionales si se compara con los bajos tipos de interés que ofrecen las cuentas bancarias, y podría suponer un apoyo adicional para el mercado en el futuro.
Después de tres años en un mercado bajista, pocos creen en China, y sigue siendo una infraponderación de consenso. Las valoraciones siguen siendo atractivas. Los movimientos alcistas sostenidos del mercado pueden convencer a más gente para comprar y, finalmente, vendrá el dinero de verdad. El tiempo lo dirá.