“Los expertos del sector especulaban sobre si el precio podría seguir aumentando a 200 dólares o incluso más desde entonces, pero la demanda mundial del petróleo fue creciendo más rápido que su oferta mundial”, analiza Yardeni.
En esta línea dice que se creía ampliamente que
Por tanto, asegura que “ahora que el precio ha caído desde los 115,15 dólares de este año el 19 de junio hasta los 76,13 dólares”, la atención se centra en cómo puede caer “más allá de lo que hizo en octubre”.
“En cuestión de unos pocos meses, el mundo de repente se reconoce que el mundo está inundado de petróleo”, apunta. “Eso es en gran parte debido al aumento extraordinario en la producción estadounidense”, destaca.
Yardeni afirma que han sido los inversores “los que han alimentado el boom de la burbuja del petróleo”. Confirma que, en muchos sentidos, se trata de una burbuja que “ha comenzado ha estallar”.
“En las últimos ocho semanas hasta la primera semana de noviembre, la producción de los Estados Unidos se ha reducido desde 0,4mbd a 9,0mbd”, concluye.