En estos momentos, Warren Buffett es el sexto mayor inversor institucional de la compañía, tal y como se puede apreciar en este gráfico.
Hay que tener en cuenta que no ha sido el inversor conocido como el Oráculo de Omaha el que ha tomado la decisión de apostar directamente por Apple, ya que ha dicho en más de una ocasión que él no invierte en lo que no conoce y que la tecnología es uno de esos casos.
La apuesta (tan rentable hasta ahora) de optar por invertir en el fabricante de iPhone es de dos de sus gestores estrella, Ted Weschler y Todd Combs, que cuenta con un fondo cada uno de unos 9.000 millones de dólares. De hecho, Berkshire ha sido el mayor comprador de Apple durante el último trimestre, según puede verse en el siguiente gráfico.
Además de Apple, Buffett también ha incrementado su posición en algunas aerolíneas: Southwest, American Airlines, Delta y United Continental, según los datos con los que cuenta el regulador.
Por el contrario, ha reducido su posición en Wall-Mart en más de 11,5 millones de acciones para quedarse con apenas 1,3 millones de títulos de la cadena de supermercados.
En estos momentos, la mayor parte de los analistas que cubren el valor apuestan por comprar acciones de la compañía, a pesar de la fuerte revalorización sufrida en los últimos meses. La compañía se revaloriza un 43% en los doce últimos meses.
Por otro lado, los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión le dan una puntuación de 9 al valor (en una escala que llega al 10). Esto implica que la compañía está en plena fase alcista.
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