El DOW JONES Ind Average retrocede un 0,67% hasta los 32.694 puntos, mientras que el S&P 500 se deja un 0,84% hasta los 4.086. Por su parte, el NASDAQ 100 arranca con descensos de un 1,15% hasta los 11.922 puntos.
En el apartado macroeconómico, los inversores han conocido poco antes de la apertura los datos de la balanza comercial, con el déficit reduciéndose un 19,1% en abril hasta los 87.100 millones de dólares, después de que las importaciones cayeran un 3,4%, mientras que las exportaciones aumentaron un 3,5%. No obstante, habrá que esperar hasta el viernes para conocer la principal referencia de la semana, que no será otra que el IPC de mayo.
Los datos de inflación llegarán en un momento en que ha vuelto a aumentar la preocupación de que los bancos centrales se vean obligados a ser más agresivos para contener los precios, causando una desaceleración económica o incluso una recesión. Este mismo martes el Banco de la Reserva de Australia ha realizado la mayor subida de los tipos en más de dos décadas, y las miradas se dirigen ahora a la reunión de este jueves del Banco Central Europeo (BCE) y de la próxima semana de la Reserva Federal.
En este difícil entorno, los inversores son reacios a asumir riesgos y la volatilidad sigue siendo elevada. “Vamos a seguir rebotando de un lado a otro durante el verano”, pronostica Julie Biel, gestora de carteras y analista de investigación senior de Kayne Anderson Rudnick. “En general, la gente está tratando de encontrar algún sentido de dirección y cómo vamos a aterrizar esta economía sin una recesión, este llamado aterrizaje suave”.
Además, el aumento de los rendimientos de los bonos se suma a la preocupación por los riesgos para el crecimiento económico a medida que los bancos centrales intensifican el endurecimiento de sus políticas. Hoy, el bono a diez años ofrece un 3,021%. Aunque supone una ligera relajación respecto a los máximos de un mes alcanzados ayer, se mantiene por encima del umbral psicológico del 3%. Mientras, en el bono a 30 años la rentabilidad asociada es de un 3,173%.
En los mercados de materias primas, las ganancias del petróleo de ayer lunes se reducen ante las subidas del dólar y de los rendimientos de los bonos, lo que hace que tanto el crudo Brent como el West Texas bajen ligeramente. El barril de West Texas cede un 0,54% hasta los 118,03 dólares, mientras que los Futuros del petróleo Brent de referencia en Europa retroceden un 0,66% hasta los 119,01 dólares el barril.
No obstante, ambas referencias siguen muy tensionadas en un entorno en el que los inversores desconfían de que el retorno de la producción venezolana y libia a Europa y Norteamérica, si se produce, sea lo suficientemente importante a corto plazo como para forzar una bajada de los precios ante la reducción de las exportaciones rusas. Los márgenes de refino a nivel mundial sugieren que la demanda de gasolina y gasóleo sigue siendo muy elevada, y el atasco de refino en los productos refinados respalda los precios del crudo.
Target se hunde más de un 7% tras un profit warning
En el ámbito empresarial, Target es hoy una de las notas negativas de la jornada tras recortar sus previsiones de margen operativo para el trimestre actual al 2% desde el 5,3% anterior. No obstante, espera que el margen se recuperare hasta cerca del 6% en la segunda mitad del año, mejor que su rendimiento medio para la temporada de otoño en los años anteriores al inicio de la pandemia. La empresa ha aclarado además que todavía espera que el crecimiento de los ingresos sea de un dígito bajo o medio para todo el año y que mantenga o gane cuota de mercado en 2022. Las acciones de la minorista se desploman cerca de un 7,5%.
Mientras, las acciones de Kohl's se disparan más de un 8% en la apertura tras anunciar que ha iniciado negociaciones exclusivas con el holding minorista Franchise Group, que propone comprarla por 60 dólares por acción, lo que valoraría Kohl's en unos 8.000 millones de dólares.
Las acciones de Kohl's cerraron el lunes a 42,12 dólares, lo que supone un valor de mercado de unos 5.400 millones de dólares. Franchise Group está trabajando con Oak Street Real Estate Capital para financiar la operación principalmente a través de bienes inmuebles. La transacción está sujeta a la aprobación de los consejos de administración de ambas empresas, y por ahora no hay garantías de que el acuerdo acabe cerrándose.
Twitter vuelve a ser uno de los protagonistas del mercado, con descensos de un 1,74% en la preapertura de Wall Street. Ayer lunes, Elon Musk lanzó su amenaza más directa de abandonar la compra, acusando abiertamente a la compañía de redes sociales de incumplir el acuerdo de fusión al no proporcionar los datos que ha solicitado sobre el spam y las cuentas falsas.
En una carta dirigida a la directora de asuntos legales, política y confianza de Twitter, Vijaya Gadde, Musk alegó que Twitter se está “resistiendo activamente y frustrando sus derechos de información”, tal y como se recoge en el acuerdo. “Se trata de un claro incumplimiento material de las obligaciones de Twitter en virtud del acuerdo de fusión y el Sr. Musk se reserva todos los derechos resultantes, incluido su derecho a no consumar la transacción y su derecho a rescindir el acuerdo de fusión”, escribió a la empresa un abogado que representa al magnate.