El Nasdaq Composite se anota un alza del 1,34%, el S&P 500 un 1,11% y el Dow Jones un 1,08%. Tras el repunte de ayer jueves, el S&P 500 sube un 3,3% en la semana, mientras que el Nasdaq se anota un 4% y el Dow un 2,6%.

Los datos económicos serán un punto clave el viernes, en un momento en que los inversores intentan determinar si la economía estadounidense está cayendo en una recesión. Poco después de la apertura se conocerán los datos de ventas de viviendas nuevas de mayo y sobre todo el informe final de la Universidad de Michigan sobre el sentimiento de los consumidores de junio.

La lectura de la confianza de los consumidores podría ser particularmente importante para los inversores, ya que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo que una caída inesperada en la lectura preliminar fue una de las razones por las que el banco central subió su tipo de interés de referencia en tres cuartos de punto a principios de este mes.

“Las conversaciones sobre la recesión siguen siendo el centro de atención en Wall Street y eso significa que cualquier repunte del mercado bursátil será probablemente de corta duración”, señala Ed Moya, analista de Oanda, en una nota. “Wall Street no tendrá respuestas en breve para las preguntas sobre cuándo alcanzará la inflación su punto máximo, cuándo veremos una recesión y hasta dónde subirá los tipos la Fed”.

El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, reafirmó ayer jueves el compromiso “incondicional” del banco central para frenar los niveles de inflación, en máximos de cuatro décadas. En su intervención ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes de EEUU, Powell reconoció que unos tipos de interés muy elevados podrían hacer subir el desempleo, pero dijo que restaurar la estabilidad de los precios era “algo que tenemos que hacer”.

En su última reunión de julio la Fed acometió una subida de tipos de 75 puntos básicos, la mayor realizada por la institución desde 1994.

En los mercados de deuda, muy sensibles a los cambios en la política monetaria, la rentabilidad del bono estadounidense de deuda a diez años sube ligeramente hasta marcar un 3,094%, mientras que en el bono a 30 años la subida de la rentabilidad es más notable, de cinco puntos hasta el 3,214%.

Mientras, los precios del petróleo avanzan en la sesión de este viernes, aunque se encaminan a una semana con saldo negativo ante los temores a una recesión que reduzca la demanda del oro negro. El barril de West Texas sube un 1,72% a primera hora de la mañana neoyorquina hasta marcar 106,02 dólares, mientras que los Futuros del petróleo Brent de referencia en Europa avanzan un 1,32% hasta los 107,89 dólares el barril.

JP Morgan eleva el precio objetivo de FedEx tras sus cuentas

Uno de los protagonistas de la mañana es Fedex, que ayer jueves presentó ganancias trimestrales y emitió un pronóstico para todo el año más fuertes de lo esperado. Sus acciones suben un 3,23% en la preapertura.

El beneficio neto ajustado del cuarto trimestre fiscal, finalizado el 31 de mayo, aumentó un 32%, hasta 1.800 millones de dólares, o 6,87 dólares por acción, respecto al año anterior. Los ingresos crecieron un 8%, 24.400 millones de dólares. El beneficio por acción superó en un céntimo la estimación de los analistas, mientras que los ingresos se situaron ligeramente por debajo del objetivo de los analistas de 24.560 millones de dólares.

La compañía emitió una previsión de beneficios por acción para todo el año de entre 22,50 y 24,50 dólares, excluyendo extraordinarios, por encima de la estimación media de los analistas de 22,14 dólares por acción.

Tras estas cuentas, los analistas de JP Morgan han elevado además el precio objetivo de FedEx de 279 dólares a 284 dólares.

Las acciones de Zendesk se disparan un 50% antes del toque de campana. De acuerdo con Bloomberg, el fabricante de software está cerca de llegar a un acuerdo para ser adquirido por un grupo de firmas lideradas por Hellman & Friedman y Permira.

La empresa californiana dijo el pasado 9 de junio que no intentaría venderse a sí misma tras una revisión estratégica en la que se contactó con 16 posibles socios estratégicos y 10 patrocinadores financieros. Finalmente, “no se presentó ninguna propuesta procesable”, apuntó Zendesk en un comunicado, ya que los postores se encontraron con “condiciones de mercado adversas y dificultades de financiación al final del proceso”.