El DOW JONES Ind Average sube un 0,65% hasta alcanzar los 31.724 puntos, mientras que el S&P 500 se anota un 1,00% hasta los 3.869 puntos. El NASDAQ 100, por su parte, sube un 1,32% hasta los 11.512 puntos.
No obstante, las señales de que la alta inflación y el endurecimiento monetario ya están presionando a los consumidores y al empleo, lo que está alimentando la preocupación de que la recuperación de la renta variable desde mediados de junio sea simplemente breve. Las actualizaciones de las empresas, como la de Apple, están avivando estos temores.
Ayer, la compañía de la manzana mordida fue uno de los protagonistas negativos de la sesión tras conocerse que planea reducir la contratación y el gasto el próximo año para prepararse para una posible recesión.
Bloomberg News informó de que la ralentización de las contrataciones y los recortes del gasto se producirán en determinadas divisiones y obedecen a una medida para “ser más cuidadosos en tiempos de incertidumbre”, citando a personas familiarizadas con el asunto que pidieron permanecer en el anonimato. Las acciones de Apple, que cerraron ayer con un descenso del 2,1%, intenta rebotar hoy un 0,6% en la preapertura.
“La inflación y su efecto perjudicial en los bolsillos de los consumidores y en los márgenes de las empresas aún no se ha visto del todo”, avisan los estrategas de Mizuho International Peter McCallum y Evelyne Gómez-Liechti, en una nota a los clientes. “Hasta entonces, no esperamos que los inversores se sientan debidamente cómodos comprando en las caídas, salvo en los nombres más defensivos”.
Mientras, las miradas siguen puestas en los bancos centrales y la senda de endurecimiento de política monetaria. Este jueves se reúne el Banco Central Europeo (BCE) y algunas informaciones apuntan a que sobre la mesa podría estar una subida de 50 puntos básicos en los tipos de interés. En todo caso, será la primera subida en más de una década. Al mismo tiempo, el mercado sigue evaluando si la próxima semana la Fed acometerá un alza de 75 o 100 puntos en el precio del dinero.
La actualidad empresarial viene marcada por la temporada de resultados. Entre las compañías que han desgranado hoy sus cuentas destaca Johnson&Johnson, que obtuvo un beneficio trimestral de 2,59 dólares por acción, 5 céntimos por acción por encima de las estimaciones. Los ingresos también superaron las previsiones. Sin embargo, la empresa ha recortado sus previsiones para todo el año debido a la fortaleza del dólar estadounidense y no a cuestiones operativas. Pese a ello, sube un 1,02% en la apertura del mercado.
También Hasbro Inc ha superado las estimaciones del mercado en 21 céntimos por acción, con un beneficio trimestral de 1,15 dólares por acción. Los ingresos se situaron muy ligeramente por debajo de las previsiones. La compañía juguetera ha explicado que sigue tomando medidas para recortar costes y asegurarse de tener suficientes inventarios para la temporada de vacaciones. Sus acciones suben algo más de un 1%.
Peor acogida han tenido las cuentas de IBM, cuyas acciones se desploman casi un 6% a pesar de haber superado los beneficios estimados. La razón, que el gigante del software ha recortado sus previsiones de flujo de caja libre para este año, citando los vientos en contra del dólar y la pérdida de negocio en Rusia.
Al cierre del mercado, se esperan también las cuentas de Netflix, que de momento sube un 1,25% en la mañana neoyorquina.
Fuera de los resultados, otra compañía que sigue en el ojo del huracán es Twitter, con la compañía de medios sociales criticando la petición de Elon Musk de un calendario de juicios más lento. Twitter quiere ir a juicio ya en septiembre, pero Musk había pedido al tribunal de Delaware que denegara su petición de un juicio acelerado y apuntara al año que viene. Musk necesitaba tiempo, argumentaron sus abogados, para llevar a cabo una cantidad exhaustiva de descubrimiento en torno a si la compañía ha tergiversado la cantidad de spam y cuentas bot en su plataforma.
Sin embargo, Twitter acusa a Musk de utilizar tácticas dilatorias para perjudicar a la empresa en el tribunal de la opinión pública. “La fecha de juicio más temprana posible es imperativa”, argumentan los abogados de la compañía. “Esta disputa tan pública perjudica a Twitter con cada día que Musk incumple. Musk amplifica este daño al utilizar la propia plataforma de la compañía como megáfono para desprestigiarla”.
La curva de tipos permanece invertida
En los mercados de renta fija, las rentabilidades de los bonos estadounidenses suben este martes, al tiempo que los inversores vigilan las publicaciones de los beneficios empresariales y el agitado sentimiento de Wall Street.
La rentabilidad del bono a diez años sube hasta el 2,991%, mientras que el rendimiento del bono alcanza el 3,165%.
Mientras, la brecha entre los rendimientos a dos y diez años se mantiene invertida mientras el mercado sopesa la posibilidad de que la Reserva Federal suba los tipos de interés en 75 puntos básicos en su reunión del 26 y 27 de julio, en lugar de la opción más agresiva de 100 puntos básicos. El rendimiento a 2 años se sitúa en el 3,1684%.
En lo que se refiere a las materias primas, los precios del petróleo apenas varían a primera hora de este martes, después de haber subido más de un 5% ayer lunes, cuando los operadores aprovecharon la caída del dólar para comprar futuros. El crudo Brent, la referencia internacional, se sitúa en 106,29 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate, el estándar estadounidense, se paga a 102,75 dólares el barril.
En el mercado resuenan además las palabras del ministro de Asuntos Exteriores saudita, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saud, que ha asegurado que “a día de hoy, no vemos una falta de petróleo en el mercado”. “Hay una falta de capacidad de refinado, que también es un problema, por lo que tenemos que invertir más en capacidad de refinado”, ha defendido.
Mientras tanto, se intensifica la preocupación por el suministro de gas por parte de Rusia en medio del enfrentamiento por su invasión de Ucrania. Según un informe, la Unión Europea se dispone a pedir a sus miembros que reduzcan el consumo de gas "inmediatamente" para preservar el suministro para el invierno.