(iii) El BCE tendrá la función de alerta (sobre los bancos en problemas), pero la decisión final de intervención la tomará un consejo ejecutivo reducido cuyos integrantes aún no están claramente identificados, pero que parece serán el propio BCE, la CE, el propio consejo del MUR y un número limitado de Estados miembros tampoco identificados aún. El Estado miembro afectado, al que pertenezca la entidad con problemas, no podrá decidir bloquear la intervención, la cual se realizará en fin de semana para que el mercado esté cerrado.
(iv) Se realizará un bail-in previo al bail-out. Es decir, antes del rescate las pérdidas se cargarán, en este orden, contra los accionistas (capital), la deuda junior (subordinadas y preferentes), la deuda senior (bonos) y la parte no garantizada de los depósitos (cualquier importe que exceda los primeros 100.000 euros, que estarán garantizados, pero por cada Estado miembro). Sólo después de haber consumido todos los recursos de la propia entidad entrará el rescate con fondos del MUR.
Bankinter dice que con esta acuerdo se rompe el vínculo directo que hasta ahora existía de forma implícita entre deuda privada y soberana, entre los bancos y los Estados, “pero no de una forma tan rotunda y definitiva como se pensaba”.
“En primer lugar, la capacidad del fondo es limitada y no puede apalancarse. Su importe parece insuficiente como para poder frenar un efecto sistémico. Es cierto que desde ahora las reglas del juego estarán más claras: pagan los inversores de cualquier tipo (accionistas, bonistas, etc.) y también los depositantes de más de 100.000 euros, pero en caso de un contagio sistémico (las crisis de los grandes bancos no suelen ser individuales) los fondos disponibles parecerán insuficientes y el pensar en un recurso último a los Estados será inevitable, por lo que, en nuestra opinión, el 'cortafuegos' diseñado sólo funcionará en caso de crisis de entidades individuales de tamaño medio o reducido que no provoquen un efecto contagio. Es cierto que se ha avanzado bastante, pero la solución adoptada no evitará crisis sistémicas, sino más bien sólo problemas de entidades individuales con tamaño limitado”, afirman tajantes desde Bankinter.
Esta tarde, a las 16:00 horas, el Ministerio de Economía y Competitividad ofrecer un briefing explicativo sobre la unión bancaria para los medios.
N.A.