La compañía, que confía en cerrar el año con ebitda positivo tras registrar en el primer trimestre un resultado bruto de explotación de 11 millones de euros en un contexto muy favorable de mercado, va a establecer un nuevo modelo de gestión comercial orientada al margen y pretende también mejorar productividad y costes.
"No podemos contar con que el entorno del primer trimestre de 2017 en términos de demanda y precios sea la nueva realidad; con sentido de urgencia, debemos establecer y desarrollar una estrategia que impulse los beneficios mediante una rápida adaptación a las tendencias actuales del mercado", dijo el vicepresidente ejecutivo, Guillermo Ulacia.
Según la compañía, que hoy ha celebrado su junta general de accionistas, un tercio del objetivo será obtenido a través de una nueva gestión comercial orientada al margen, mientras que los otros dos tercios serán obtenidos a través de la mejora de productividad y costes.
Las acciones de la compañía caen un 1,23% hasta los 1,205 euros por acción.