Hay compañías que buscan la línea de arrepentimiento, el momento para cambiar su situación y que puedan empezar a demostrar que pueden cambiar su tendencia en la bolsa española. Tras haber vivido un vía crucis ahora llega el momento de ver si van a seguir prolongando esa mala dinámica bursátil o si por el contrario a visos de luz a partir de ahora. Sobre todo todavía que faltan más de un semestre para el cierre del ejercicio.

POPULAR

La entidad bancaria española sin duda es una de las que ocupa este espacio. Ha ido acumulando un obstáculo tras otro como muestran los últimos acontecimientos. Provisiones constantes, ampliaciones de capital, modificaciones en sus resultados anuales e incluso la dimisión de su reciente nombrado consejero delegado, Pedro Larena, han sido varias de las últimas piedras que ha tenido en el camino.

Un auténtico calvario que ha llevado al valor a reflejar pérdidas en la bolsa española de más de un 60% en el último año e incluso más de un 94% desde sus máximos históricos, antes de que se produjera la crisis financiera en España. Desde entonces no ha conseguido recuperarse y su dinámica ha ido a mucho peor. No ha conseguido salir de la espiral bajista. Desde su máxima cotización en 2014 ha caído hasta más de un 86%.

De esta manera, si nos centramos en los filtros técnicos de Estrategias de Inversión observamos que Popular se encuentra en fase de rebote. La acción recibe una puntuación de 3 puntos en una escala que va del cero al diez. Únicamente, encontraría dos parámetros en positivo: su tendencia es alcista en el medio plazo y el volumen de contratación a largo plazo es creciente.

ABENGOA

Es otra de las empresas que más se ha fustigado hasta la saciedad en los últimos tiempos. Hasta el punto que ha estado en duda su posible subsistencia tras una gestión bastante desastrosa de su negocio. Tan solo basta con ver la evolución del gráfico de sus acciones en estas fechas al haber perdido más de un 99% del cómputo global de su capitalización bursátil.

Sin embargo, el plan de viabilidad le da cierto aire para aquellos que quieran apostar de cara al futuro, aunque los expertos siguen hablando de mucha cautela con respecto a este valor y mejor permanecer fuera. Por lo pronto, alargando su cotización al pasado, vemos que ha perdido prácticamente el 100% de su valor en bolsa. En julio de 2007 cotizaba a más de 36 euros. Ahora lo hace en poco más de 4 céntimos.

Así pues, si nos fijamos en nuestros filtros técnicos de Estrategias de Inversión observamos que Abengoa se encuentra en fase bajista, mientras que recibe una puntuación de 1 punto en una escala que oscila entre el cero y el diez. Únicamente mostraría una variable en positivo: su volumen de contratación a medio plazo es decreciente.

PRISA

Sobre Prisa, no ha pasado sus mejores momentos, sino más bien lo contrario. En el 2016 le ha ido también bastante negativamente, pese a un inicio de año con subidas del entorno del 12%. Pero en este tiempo su evolución en términos bursátiles ha sido bastante pobre con caídas de más del 20%. Tras un proceso de reestructuración y con la necesidad de ir reduciendo la gran deuda que pesaba sobre sus hombres, sus acciones se han llegado a desplomar hasta más de un 81% en los últimos cinco años.

En cuanto a su aspecto técnico, los indicadores técnicos de la zona Premium de Estrategias de Inversión, muestran que Prisa se encuentra ahora mismo en fase bajista, mientras que tiene una puntuación de dos puntos en una escala que oscila entre el cero y el diez. Su tendencia de medio y largo plazo es bajista y solo plasma tres variables en positivo: el momento total lento es positivo, y la volatilidad del valor es decreciente en todos los marcos temporales.

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