La pregunta que se está haciendo actualmente el inversor es si debemos asumir que la corrección iniciada pudo haber concluido a los mínimos ya testeados o si por el contrario debemos considerar la posibilidad de mayores debilidades más adelante.
En este sentido, vamos a tomar como referencia dos puntos. En primer lugar, la caída desarrollada hacia finales del 2011 desde los 249 dólares hasta los 166 dólares por acción. Es decir, en términos absolutos la empresa cayó 80 dólares por acción.
En esa línea, pasaríamos a analizar un poco el comportamiento lo que es la acción al corto plazo. En la gráfica que vemos, se observa que desde la caída de los 408 dólares y los 337 dólares, la acción ha logrado recuperar, ni más ni menos, que el 61,8%. Es importante, por tanto, que los precios logren sostenerse por debajo de esta zona para poder considerar si se retoma la tendencia bajista o no.
Actualmente un movimiento por encima de la zona de 380 o 385 dólares es necesario considerar un regreso hacia la zona de máximos de 408 dólares. En caso contrario, mientras los precios no logren superar los 385 dólares debemos saber que estos estarán vulnerables para volver a caer.