Hace poco más de un año, en la primavera de 2022, publicábamos en Estrategias de Inversión un informe de valoración fundamental de Thales, que concluíamos con una recomendación positiva para un horizonte de inversión de largo plazo. En estos 15 meses desde nuestra recomendación, los títulos de la francesa se han revalorizado más de un 20%. Toca ahora revisar valoración, perspectivas y valorar si todavía queda margen entre el valor de la compañía y el precio que paga el mercado. Ya les adelanto que sí, que nuestra recomendación continúa siendo positiva para este líder mundial en tecnología avanzada.

Cotización histórica de Thales

Thales no solo es una compañía de defensa, sino que se mueve en los negocios de innovación digital, conectividad, big data, inteligencia artificial, ciberseguridad y tecnología cuántica. Sus clientes abarcan empresas, organizaciones y gobiernos a los que les aporta servicios de defensa, aeronáutica, espacio, transporte e identidad digital y soluciones de seguridad. Concretamente, el 50% de los ingresos de Thales proceden efectivamente del sector Defensa, con Aeroespacial (Satélite y Teleco) aportando ya en el 27% sobre el total y Ciberseguridad al alza, aportando ahora el 21% de su facturación total. Muy importante para visualizar el potencial de su negocio a futuro es la cartera de pedidos que crece un 7% en el primer semestre de 2023. La facturación orgánica crece un +7% de enero a junio, hasta los 8.700 millones de euros de forma orgánica. El EBIT del grupo en el primer semestre de 2023 fue de 993 millones de euros, +13,1% en base orgánica y frente a igual periodo de un año atrás. El Beneficio neto creció un 15%, para cerrar el semestre en 649 millones de euros, con 99 millones de cash Flow operativo. 

Destacar la fuerte generación de caja de la compañía que le permite retribuir generosamente a sus accionistas (2,59€/acción a cuenta de 2022 y pagados en 2023, lo que supuso una rentabilidad sobre dividendo-Yield del 2,2%) y al mismo tiempo, llevar a cabo fuertes inversiones, de hasta 1.000 millones de euros para desarrollar su plan estratégico y política de crecimiento sin tensiones por el lado de la financiación. 

VALORACIÓN FUNDAMENTAL

Las previsiones de cara a la segunda parte de 2023 son muy positivas para Thales. La cartera seguirá engordando previsiblemente y todo apunta a que la compañía conseguirá situar el crecimiento de facturación en la parte alta de sus previsiones (+4%/+7%). El aumento de los presupuestos militares en occidente ayudará al crecimiento en el negocio de Defensa de Thales, que complementará de forma cada vez más creciente y diversificada con una muy buena evolución esperada en Ciberseguridad y Aeroespacial. La buena generación de caja, unido a la fortaleza de balance, permitirán afrontar inversiones, crecimiento y pago al accionista creciente.

Sigue en directo la cotización de Thales

En una valoración por múltiplos y ratios, bajo estimación de resultados para el ejercicio actual completo, Thales cotiza con descuento frente a sus principales competidores. El mercado descuenta un PER de 18,2v para la francesa, frente a más de 19,9v de media entre competidores. Margen de mejora también por ratio sobre ventas, (PSV 1.5v Thales vs. 2,75v sector), también por PCF, en 13,2v para Thales y 16,19v de media de la competencia y similar descuento por EV/EBITDA. 

En cuanto a rentabilidades, la rentabilidad económica (ROA) de Thales cierra 2022 en 3,26% y llegará al 4,7% según previsiones para 2023; rentabilidad financiera (ROE) pasará del 15,63% en 2022 al 20% en 2023. La rentabilidad sobre dividendos es superior a la reportada de media entre sus iguales. 

Nuestra recomendación para los títulos de Thales, bajo criterios de valoración fundamental y con horizonte de inversión de largo plazo sigue siendo positiva.