Los movimientos organizativos en la cúpula de Tesla parece que no han gustado al mercado. Si Tesla se estrellaba en bolsa en 2022 -el fabricante de coches eléctricos se ha desplomado un 68%, lo que ha reducido su capitalización bursátil por debajo de 350.000 millones de dólares-, parece que el nuevo ejercicio no tiene vistos de empezar en números verdes.
Este martes, cuando quedan cinco horas para la apertura de Wall Street, las acciones de Tesla cotizan con descensos del 3,74% en los 118,57 dólares.
Y lo hacen precisamente en una jornada en la que se ha conocido que Tom Zhu, jefe de Tesla en China, ha sido ascendido a la supervisión directa de las plantas de ensamblaje del fabricante de coches eléctricos en EEUU, así como de las operaciones de ventas en Norteamérica y Europa, según una publicación interna de las líneas jerárquicas revisada por Reuters.
La publicación de Tesla mostraba que el título de Zhu de vicepresidente para la Gran China no había cambiado y que también conservaba sus responsabilidades como el ejecutivo de mayor rango de Tesla para las ventas en el resto de Asia a partir del martes.
Este cambio convierte a Zhu en el ejecutivo de más alto perfil de Tesla después de su máximo ejecutivo, Elon Musk, con la supervisión directa de las entregas en todos sus principales mercados y las operaciones de sus centros de producción clave.
La estructura jerárquica de Zhu mantendría separados el diseño y el desarrollo de los vehículos de Tesla —áreas en las que Musk ha estado muy implicado—, al tiempo que crearía un aparente adjunto de Musk en los retos a más corto plazo de la gestión de las ventas y la producción mundiales.
Reuters revisó el organigrama que había sido publicado internamente por Tesla y confirmó el cambio con dos personas que lo habían visto. Pidieron no ser nombradas porque no estaban autorizadas a hablar del asunto.
A finales del año pasado, Tesla contrató a Zhu y a un equipo de sus subordinados para solucionar problemas de producción en Estados Unidos, lo que hizo pensar a sus colegas que se le estaba preparando para un puesto más importante.
El nombramiento de Zhu para un puesto global se produce en un momento en el que Musk ha estado distraído con la adquisición de Twitter y los analistas e inversores de Tesla han instado a que se tomen medidas que refuercen la cúpula ejecutiva y le permitan centrarse en Tesla. Bajo Zhu, la planta de Tesla en Shanghái se recuperó con fuerza de los confinamientos de COVID en China.
Por otro lado, Tesla dijo ayer lunes que había entregado 405.278 vehículos en el cuarto trimestre, por debajo de las estimaciones de Wall Street, según datos recopilados por Refinitiv. La empresa había entregado 308.600 vehículos en el mismo periodo del año anterior.