- La transición energética supone un gran catalizador de demanda de materias primas como cobre, aluminio, paladio, litio, níquel... ¿Creen que esto va a impulsar los precios de estas materias primas durante años?
Sí, absolutamente. La transición energética es muy intensiva en materias primas y supone una demanda adicional en tecnologías como la electrificación, energía eólica y solar. A nivel de oferta que es nuestra tesis a largo plazo es que las compañías no están preparadas para este tirón adicional de la demanda. A nivel de oferta creemos que vendrán tiempos duros para satisfacer toda esta demanda adicional. Creemos que a medio y largo plazo tienen mucho recorrido alcista porque actualmente hay una infrainversión por el lado de la oferta, mientras que la demanda va a aumentar en los próximos años.
- También apuntan que la urbanización y el crecimiento de la clase media en los países emergentes impulsa este tipo de minerales y materias primas... ¿a qué tipo de materias primas le dan mayor potencial/sobreponderan en el fondo Allianz Global Metals and Minning?
Eso significa que hay muchas cosas en juego. La urbanización y las tendencias demográficas son un catalizador actual y juegan un papel importante. Así que además de la transición energética que mencionaste antes, la inversión en infraestructuras también tiene mucha importancia. Tenemos mucha confianza en que metales básicos como el cobre y el aluminio tendrán una gran demanda desde el punto de vista de que la urbanización supone un tirón de la demanda y que se suma al bajo rendimiento de la oferta. Así que la brecha entre las dos fuerzas es probable que impulse los precios.
- A corto plazo, sin embargo, las materias primas industriales acumulan descensos al calor de la posible recesión de las economías desarrolladas y al freno del crecimiento en China, ¿cómo afecta la guerra de Ucrania en el escenario de corto y medio plazo?
Sí. Lo que hemos mencionado antes es el escenario de medio y largo plazo para las materias primas. Por supuesto, a corto plazo, como mencionas, la situación en China y las últimas noticias ponen un signo de interrogación en cuanto a su crecimiento económico. Por supuesto, la situación en Ucrania añade más incertidumbre. Cuando hablamos de China, la estrategia de Covid cero es algo que puede poner en duda el crecimiento económico del país y, por tanto, también el crecimiento mundial. Así que definitivamente esto nos mantiene un poco más, digamos, cautelosos.
En cuanto a Ucrania y Rusia, la Bolsa de Metales de Londres (LME) está debatiendo sobre si los metales rusos seguirán siendo aceptados a negociación. Rusia es bastante importante en un par de productos básicos, como por ejemplo el níquel, el aluminio, el paladio, los fertilizantes de potasa… Todos estos productos son muy importantes e influyen en la inflación. Por supuesto, todas las aplicaciones que tienen este tipo de materiales y las compañías que consumen estas materias primas se están esforzando por encontrar fuentes de suministro adicionales. Esto es exactamente a lo que la industria se enfrenta actualmente, una reorganización y en cierto modo, se podría argumentar que este es ya un presagio de que estamos ante la desglobalización. Está claro que el mundo ha cambiado, en los últimos 20 años sólo hemos visto una dirección en la globalización y ahora estamos cerca de llegar a su fin y se podría invertir un poco.
- La subida de tipos de interés y el mayor coste de financiación, ¿creen que frenan los planes de inversión de las compañías y con ello una menor demanda de materiales básicos?
Sí. Por supuesto, el cambio en los tipos de interés y su subida empañan claramente las perspectivas de crecimiento para todo tipo de proyectos de inversión, y también hay preocupación en el mercado inmobiliario. Todo esto no es fácil para las compañías, pero diría que no es un impedimento tan grande porque la mayoría de las empresas mineras presentan balances saludables, están bien capitalizadas, no están muy apalancadas y no cuentan con vencimientos de deuda relevante en los próximos dos años… Así que son bastante independientes en ese sentido.
- Mucho se habla de las tierras raras de China, ¿qué importancia le dan en Allianz?
Las tierras raras es un tema muy especializado. Lo interesante es que, en realidad, aunque se llaman tierras raras, no son raras, en realidad son bastante abundantes. Lo único es que el procesamiento de las tierras raras es complicado y a menudo desde el punto de vista medioambiental, extremadamente controvertido. Así que esa es la razón por la que los proveedores chinos han construido una posición dominante en el mercado de tierras raras. De hecho, hasta ahora apenas había compañías que no fuesen chinas que suministrarán los minerales presentes en las tierras raras, pero esto está a punto de cambiar. Ya tenemos un holding (occidental) también que está activo en ese negocio, podríamos ver una trayectoria interesante para este holding, pero supongo que a nivel de nuestro fondo sólo representará una pequeña fracción porque es un mercado pequeño y nunca estará entre las diez primeras posiciones.
- ¿Qué debe tener una compañía para estar entre las primeras posiciones del fondo? ¿Cómo las selecciona?
No se nos permite hablar de compañías individuales. Sin embargo, podemos decir que sobreponemos a un grupo de compañías, por ejemplo las mineras de cobre porque creemos que el cobre juega un papel clave en términos de electrificación, que es un pilar de la transición energética. Definitivamente, el futuro de las compañías especializadas de cobre es bastante prometedor, aunque actualmente en el corto plazo vemos algunas decepciones a cuenta de China y la recesión que se avecina en algunas zonas del mundo. Esto quizá sea una ventana de oportunidad interesante para invertir en algunas de estas empresas.