Comienza la cuenta atrás para que Telefónica saque a cotizar su filial de torres y cables submarinos. En concreto, su intención es que antes del 1 de julio las acciones estén en el mercado de valores, por si necesita que le ayude a financiar su dividendo en efectivo.
Como muy tarde, debería estar el 1 de julio. Es la fecha que se ha propuesto Telefónica para que Telxius, su filial de torres y cables submarinos, dé el salto al parqué. Así lo señaló el pasado viernes el director de estrategia de la operadora, Ángel Vilá, que consideró qu
e los principales datos y magnitudes de la nueva filial se conocerán a partir de Semana Santa con lo que los expertos creen que, ya en Abril, podría estar preparado el folleto de emisión en el que estarían trabajando Goldman Sachs y JP Morgan, como coordinadores globales de la OPV. Para cumplir este plazo, en cierta forma se obliga a acelerar el proceso corporativo y societario de aportación de activos a la nueva sociedad para que el folleto esté disponible en las próximas semanas, de forma que pueda ser aprobado por la CNMV.
En este sentido,
la operadora confía en lograr una valoración inicial alrededor de 5.000 millones de euros, a la que posteriormente se agregarían nuevos activos adquiridos a otros operadores o compañías de torres. Inicialmente, la operadora que preside César Alierta tiene previsto aportar a Telxius diversos cables submarinos y alrededor de 15.000 torres de telefónica móvil, de las que un 73% estarán en España y el resto principalmente en Alemania y Brasil. Un stock que forma parte de 64.000 torres en todo el mundo, con la capacidad de aportar activos a la nueva sociedad es muy elevada.
Distintas fuentes de mercado citadas por Expansión hablan de unos activos por valor de 650 millones de euros de facturación iniciales con un margen bruto de explotación de 350 millones de euros. Este dato junto a una valoración de 15 veces – similar a la aplicada por Cellnex en su salida a bolsa –colocaría el nuevo valor de Telefónica en torno a 5.250 millones de euros. Esto reportaría a Telefónica en torno a 2.000 millones de euros si coloca en torno a un 40% de la compañía en bolsa.
Dentro del sector, Telecom Italia ha sacado a Bolsa una filial similar – Inwit- de la que colocó un 40% mientras que Abertis sacó el año pasado el 55% de Cellnex.