Apertura en positivo en Wall Street, tras el nuevo acercamiento comercial entre EEUU y China. El Dow Jones sube un 0,20%; el S&P 500, un 0,27% y el Nasdaq, un 0,49%.
Con el Dow Jones en los 27.206,07 puntos, la mayor subida es la de Merck, que repunta un 1,51%, por delante de Visa y de P&G, que se revalorizan un 1,23% y un 1,10%, respectivamente.
Por el contrario, Exxon lidera los avances del Dow Jones, al repuntar un 1,53%, seguido de Caterpillar, que pierde un 1,22%, y de Chevron, que se deja un 1,07%.
Después de que ayer el Gobierno chino diera a conocer una lista de productos procedentes de EEUU a los que eximirá del pago de las nuevas tarifas, por la tarde, y ya con los mercados cerrados, el presidente de estadounidense, Donald Trump, anunció el retraso en 15 días de la entrada en vigor del incremento de las tarifas a un total de 250.000 millones de dólares de importaciones chinas desde el 25% al 30%.
En Wall Street hoy también se cotizan el IPC de agosto y las cifras del paro semanal.
El índice de precios al consumidor (IPC) de EEUU subió un 1,7% en agosto en comparación interanual, desacelerándose en una décima respecto al mes anterior y quedando por debajo de las estimaciones de los analistas (1,8%). En comparación con julio, la subida se mantuvo en el 0,1%, cumpliendo con las previsiones.
En tasa subyacente, el IPC repuntó un 2,4%, su mayor incremento desde julio de 2018, desde el 2,2% del mes anterior.
Sin alimentos y energía, la inflación estadounidense mantuvo el crecimiento mensual en el 0,3%.
Por su parte, las nuevas peticiones semanales de subsidio por desempleo se redujeron hasta las 204.000, desde las 219.000 de la semana anterior, un descenso mayor de lo esperado por el mercado (215.000).
De esta forma, las nuevas solicitudes de subsidios por desempleo de EEUU se encuentran en mínimos de cinco meses, lo que sugiere que el mercado laboral sigue fuerte a pesar de la desaceleración en el crecimiento de las contrataciones.
De esta forma, Wall Street mantiene la tendencia positiva con la que ya cerró la sesión de ayer, tras una jornada de ganancias corporativas liderada por importantes firmas del mercado, como Boeing y Apple, que se revalorizaron más de un 3% y ayudaron al Dow Jones de Industriales a recuperar los 27.000 puntos.
Esta puede ser la séptima jornada consecutiva con subidas para el Dow Jones.
En Wall Street hoy se seguirá muy de cerca la evolución de los mercados del Viejo Continente, después de que el Banco Central Europeo (BCE) haya anunciado un paquete de bajada de tipos, nuevas compras y facilidades para los bancos.
En concreto, el organismo ha decidido modificar sus tipos de interés por primera vez desde 2016 recortando 10 puntos básicos el tipo de facilidad de depósito, hasta situarlo en el -0,5%, al tiempo que ha dejado el tipo de interés de referencia en el 0% y el de facilidad de préstamo en el 0,25%.
La autoridad monetaria también ha anunciado, entre otras cuestiones, que reanuda las compras netas de activos, por valor de 20.000 millones de euros al mes a partir del 1 de noviembre, por un periodo indeterminado.
Tras las decisiones comunicadas por el BCE, el presidente de EEUU, ha señalado, a través de Twitter, que "el Banco Central Europeo, actuando rápidamente, recorta los tipos 10 puntos básicos. Ellos tratan de, y lo están logrando, depreciar el euro contra un dólar MUY fuerte, dañando a las exportaciones de Estados Unidos (...) Y la Fed espera, espera y espera".
"¡A ellos les pagan por endeudarse, mientras que nosotros pagamos intereses!", ha agregado.
En la apertura de la sesión de Wall Street, el euro avanza frente al dólar y se intercambia a 1,102 billetes verdes.
En el mercado de materias primas, los precios del petróleo caen más de un 2%. El Brent de referencia en Europa cede un 2,53%, hasta los 59,24 dólares, al tiempo que el West Texas baja un 2,39%, hasta los 54,42 dólares por barril.
Según publica la agencia Reuters, citando a una fuente, la OPEP y sus aliados, conocidos como OPEC +, están discutiendo la mejora del cumplimiento de los recortes de producción de petróleo, lo que ofrecería una reducción efectiva en la producción de alrededor de 400,000 barriles por día.